La historia de una chamarra inocente que provocó pánico en Pasadena
Fuerte presencia policíaca, el cierre de una autopista y la suspensión de una línea de tren... ¿por una chamarra?
Se lanzó una investigación policiaca que duró dos horas en Pasadena. Crédito: Captura/NBC4
Poco después de las 8:30 a.m. del miércoles, una llamada realizada al 911 desencadenaría una serie de eventos al parecer completamente innecesarios, pues bien, una chamarra cualquiera no presenta tanto riesgo, ¿o sí?
Cuando una persona observó o otra arrojar un objeto hacia la autopista 210, sobre la avenida Lake en Pasadena, ésta fue rápida en actuar y llamar a las autoridades para denunciar el hecho, haciendo así justicia al lema “si ves algo, di algo” que tanto emplea el Sheriff de Los Ángeles (LASD). Pues bien, después de haber sido sede de uno de los ataques terroristas más mortíferos en suelo estadounidense, la matanza de San Bernardino del año pasado, es mejor prevenir que lamentar.
La Policía de Pasadena actuó rápido.
Alertó al LASD, a la Patrulla de Caminos de California (CHP) y a la Autoridad Metropolitana de Transporte (Metro) sobre lo ocurrido y en cuestión de minutos se efectuaron cierres y suspensión de servicios que afectaron el transporte matutino en el condado de Los Ángeles.
Metro resguardó a sus pasajeros al suspender la operación de su Línea Dorada en la estación Lake Avenue, cuyo puente yace justo por encima de la autopista 210.
La CHP cerró ambos tramos de la autopista que cruza por Pasadena a la altura de la avenida Lake, obstruyendo el paso al este y oeste así provocando más tráfico de lo normal durante el viaje matutino de miles de conductores surcalifornianos.
Y el LASD empleó a varios agentes especializados en la desactivación de materiales explosivos para investigar el “objeto”.
Y mientras todo esto ocurría, pasajeros de Metro varados tuvieron que recurrir a transporte alternativo, utilizando los autobuses del valle de San Gabriel para llegar a su destino. Conductores atrapados en la autopista desbordaron sus vehículos para tomarse fotos con las patrullas que obstruían el paso, mientras otros intentaban dar la vuelta para salir de congestionamiento.
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Poco antes de las 11, y con el empleo de un robot antibombas, el LASD finalmente determinó que el “objeto”, una chamarra al parecer de piel y negra, no era peligrosa ni explosiva.
Según el LASD, cámaras de vigilancia posicionadas en la estación Lake Avenue captaron al hombre responsable de desechar la prenda en la autopista. Éste fue arrestado después de un breve forcejeo con las autoridades en la estación Memoral Park a poca distancia del lugar de los hechos.
El estado elevado de vigilancia y respuesta se dio a un día de que una amenaza anónima fuera lanzada contra una estación de Metro, amenaza que no tuvo fundamento alguno.
