Dinosaurios y otras remodelaciones de la “Casa de Picapiedra”

Florence Fang, inmigrante china, adquirió la casa por 2.8 millones de dólares

La "Casa de Picapiedra" (que no fue diseñada con ese sentido) puede verse desde la Interstate 280

La "Casa de Picapiedra" (que no fue diseñada con ese sentido) puede verse desde la Interstate 280 Crédito: The Mercury News (Captura)

Tras adquirir la Casa de Picapiedra (“Flintstone House”) por 2.8 millones de dólares, Florence Fang, inmigrante china, consideró sus opciones de paisajismo… Y terminó decantándose por una manada de dinosaurios de 15 pies de altura.

Icónica por sus cúpulas naranjas y púrpuras, esta multimillonaria casa de Hillsborough es tan amada como odiada. Y ahora, tendrá más motivos para despertar ambas sensaciones.

Estas criaturas suponen los primeros cambios de un lugar que languideció durante dos años, al permanecer sin vender (todo el mundo quería verla, sí, pero no necesariamente comprarla), pero no los únicos: Fang también ha incorporado un gigantesco mamut lanudo y una estilizada jirafa, ambos de metal; un jardín de coloridos y enormes hongos, y una escultura de arco iris y pavo real, todo ello visible desde la Interstate 280.

“Antes, cuando pasaba, siempre me preguntaba quién estaba viviendo en esa casa. Ahora esa soy”, dijo esta magnate jubilada de 83 años, estallando en carcajadas durante su primera entrevista desde que adquirió la casa el año pasado, antes de añadir que ha recibido múltiples muestras de cariño por salvar uno de los hogares más icónicos del Área de la Bahía.

El propio William Nicholson, arquitecto que diseñó el hogar en la década de 1970, está feliz con los cambios, aunque admite que “Flintstone House” le pareció en un principio un insulto a su obra de arte.

Fang, miembro de una poderosa familia, estima que por el momento ha gastado hasta un cuarto de millón de dólares mejorando y decorando la casa, principalmente en el muro de contención. Y aunque dedica solo unas pocas horas al día de trabajo físico (ella misma hace gran parte del trabajo de decoración), admite que constantemente está pensando en el proyecto. “Cada vez que me siento aquí por la mañana, siento que Dios realmente me está bendiciendo”, dice ilusionada.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain