Ejército busca alistar latinos

A medida que la crisis económica mantiene el índice de desempleo alto en el área de Los Ángeles, el incremento de candidatos para el Ejército en los centros de reclutamiento también está alcanzando niveles al alza no antes visto, primordialmente en zonas con alto índice de población latina.

El centro de reclutamiento de Huntington Park, que el año pasado incrementó su meta de alistamiento en un 40 por ciento, ha modernizado y ampliado sus instalaciones para cambiar el proceso de reclutamiento de tipo individual a un sistema de equipo.

El cambio obedece según las autoridades a una estrategia más completa del ejército para iniciar reclutamientos para las diferentes carreras de las Fuerzas Armadas.

La semana pasada, ese centro tuvo un total de 15 alistamientos de jóvenes en un solo día, los cuales se unen a una tendencia al alza en reclutamientos, que algunos creen se debe a la falta de empleos en California, y a una campaña agresiva y dirigida a las minorías por de parte del ejército.

Nilsson Huezo, un trabajador de la construcción y padre de familia de dos niñas que por varios meses ha batallado buscando un empleo fijo, fue uno de esos 15 nuevos reclutas que decidieron buscar una carrera diferente.

“Siempre había querido tener una carrera en agencias del orden y pues el trabajo se puso muy despacio”, expresó este hijo de padres mexicanos que firmó su contrato en espera de la ayuda monetaria para su carrera universitaria. “Para mí, creo que es una experiencia y un paso para una puerta de oportunidades”, agregó.

Pero para otros, como Michael Prysner, de la Coalición ANSWER — que se opone al reclutamiento del ejército-, el aumento de alistamientos se está dando más en zonas de latinos y afroamericanos porque la estrategia es precisamente buscar personas en estas comunidades más vulnerables.

“Se enfocan en lugares donde hay personas con bajos ingresos, sin trabajos o que necesitan un camino a la ciudadanía”, expresó Prysner. “Saben perfectamente que estas son personas con pocas opciones, sin educación y a los que es fácil engañarles”, agregó.

Sin embargo, el sargento de primera clase, Giovanni Moreno, quien se encarga de ser enlace para las relaciones comunitarias del Ejército en esta zona, esto no es precisamente la realidad de la estrategia.

“Lo que existe es una mentalidad de desinformación”, subrayó. “En el ejército hay muchas oportunidades de carreras, esto no es el último recurso como piensan, es solo otra opción más”, agregó.

Datos del Ejército muestran que el área de Los Ángeles ha experimentado aumentos en reclutamientos de hasta 35% en el año fiscal 2009, el dato más reciente que se pudo obtener, lo cual marca su mejor año de reclutamientos desde 2003.

En ese año, cerca de 2,300 personas se inscribieron para ser soldados, lo cual representa un aumento comparando los 1,700 que lo hicieron en el 2008 en los 17 centros que tiene el ejército en el área metropolitana de Los Ángeles.

Estaciones como Glendale, Pomona, Torrance y West Covina vieron por igual incrementos en el 2009. A nivel estatal el reclutamiento aumentó en un 27 por ciento, comparado con el 11 por ciento que hubo a nivel nacional.

Para las autoridades no es tanto el desempleo el que está generando este aumento, sino una estrategia de alcance comunitario y de educación sobre lo que ofrece el Ejército.

“Queremos aumentar nuestras filas de oficiales de alto rango con latinos y minorías”, expresó el Mayor Abel Hernández, encargado de la compañía de reclutamiento de Long Beach. “Estamos enseñándoles que una vez se pongan el uniforme, les vamos a educar y dar las herramientas que necesitan para ser mejores”, agregó.