Florida honra a sus presos veteranos de guerra
Crean pabellones dedicados sólo a esta población
Orlando (EE.UU.) – En vísperas de la conmemoración nacional que honra a los veteranos de guerra estadounidenses, el Estado de la Florida encontró una manera nueva de rendir tributo a los miles de excombatientes encerrados en sus cárceles- Un pabellón sólo para ellos.
La iniciativa es la primera etapa del Programa de Dormitorios para Veteranos de Guerra que inauguraron las autoridades del Departamento de Correcciones de Florida (DOC, en inglés) en cinco de sus instituciones carcelarias.
Esta iniciativa se anuncia antes de que en Estados Unidos se celebre el Día de los Veteranos, una fiesta nacional que rinde tributo a los excombatientes, quienes el 11 de noviembre de cada año disfrutan en todo el país de reconocimientos y ofertas especiales de todo tipo.
La idea anunciada es crear en las prisiones de este Estado un pabellón reservado para parte de los 6,700 internos que están registrados como veteranos de guerra en las cárceles de Florida.
Sólo podrán acogerse al programa y disfrutar de los nuevos pabellones quienes hayan sido dados de baja o retirados de las fuerzas militares con honores, según explicó Gretl Plessinger, portavoz del DOC.
Las aéreas comunes de los dormitorios para veteranos están decoradas con enormes murales de banderas, pintadas por internos “que trabajan y se preparan para su reintegración en la sociedad”, según añadió a Efe el comisionado de prisiones de Florida, Kenneth Tucker.
“Al ubicar a los veteranos internos en el mismo dormitorio antes de que salgan de prisión los ayudamos a trabajar juntos y recuperar esas mismas cualidades de buen carácter e integridad mientras aprenden acerca de los programas y beneficios disponibles específicamente para los veteranos de guerra”, señaló.
Los veteranos internos, algunos de ellos encarcelados por cometer crímenes como violaciones sexuales, asaltos y robos, tendrán que demostrar buena conducta y someterse a estándares estrictos propios de un dormitorio militar.
