Pesar por crimen de estudiantes universitarios

Datos de la policía y testimonios de vecinos en un barrio a menos de una milla al noroeste de la Universidad del Sur de California (USC) aseguran que el crimen en esa zona ha dismuido, a pesar de tener una reputación de peligroso.

Sin embargo, amigos de dos estudiantes chinos asesinados el miércoles en la zona dicen que las víctimas, que regresaban a su casa y que se cree que fueron víctimas de un asalto para robarles el auto, estaban preocupados por su seguridad.

Ayer, frente a la casa donde los dos estudiantes graduados, de 23 años, murieron supuestamente a manos de un pistolero, levantaron un altar. Flores y una libreta para que la gente escribiera mensajes a los padres de los difuntos Ming Qu y su amiga, Ying Wu, ambos estudiantes de ingeniería eléctrica.

El mismo estaba colocado en el zaguán donde cayó Qu al tratar de buscar ayuda después de que ambos fueron heridos.

Varios compañeros de destudios, principalmente provenientes de China, se dieron cita al lugar para expresar sus condolencias. Un de ellos, Justin Zhang, de 24 años, conocía a Wu.

“Ella me contaba que por la noche no había luz aquí y que la policía no patrullaba y tampoco los agentes de la universidad, entonces no se sentía segura. Pero su contrato de arrendamiento era por un año, entonces se tenía que esperar”, relató Zhang. “Pero desafortunadamente?”, dijo sin terminar la oración.

La tragedia ocurrió alrededor de la 1:00 de la madrugada. del miércoles, cuando Qu condujo a Wu a su casa en la cuadra 2700 de la avenida Raymond.

Investigadores en el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) sospechan que pudo ser un asaltante solitario, y que quizás tenía por motivo robar el coche de Qu, un BMW.

Los estudiantes se quedaron hasta tarde en la biblioteca de la universidad porque estaban trabajaban en grupo para un proyecto grande que se tenía que entregar en dos semanas para su clase de laboratorio, según Jack Joe, otro amigo de Wu.

Joe, de 25 años, agregó que su compañero de cuarto también estaba en la biblioteca, y se comunicó con Wu después que se fueron y antes del incidente.

“Ella era muy chistosa, optimista, y ayudaba a todos”, contó Joe. “Se iba graduar este diciembre”.

Ni Joe ni Zhang conocían a Qu.

A pesar de este incidente, oficiales de LAPD dijeron que los homicidios y el crimen violento en el suroeste, que incluye a USC y partes de sur-centro, bajaron 20% este año hasta la primera semana de abril, en comparación al mismo periodo el año pasado. Este año, se han registrado cuatro homicidios y 343 incidentes violentos que también incluye violaciones, robos, y asaltos agravados, según la agente Wendy Reyes, portavoz para LAPD.

En el 2011, ocurrieron 1,738 incidentes violentos comparados con los 1,829 instancias en el 2010.

Crystal Rivera, de 22 años y quien vivía muy cerca Wu, expresó que el barrio hace 10 años era muy malo, especialmente se registraban muchas balaceras.

“Luego mejoró mucho, y hasta quitaron a la gente que vendía drogas al otro lado de la calle”, indicó Rivera, apuntando a una casa que tenía un cartel de “Para alquilar”.

“No creo que tenga nada que ver con el barrio”, agregó Erika Pérez, quien vive en la casa adyacente a Rivera.

La mayoría de las personas que viven en el vecindario con casas estilo victorianas son ancianos o estudiantes, y hay diversidad de etnias, dijo Rivera.

“Jamás esperábamos que algo así pasara, supongo que por eso estamos tan conmocionados”, expresó. “Ya tengo miedo, porque vuelvo a la casa tarde, como a las 10 de la noche”, sostuvo.

Jay Juster, de 20 años y estudiante de filosofía en USC, dijo que es un alivio vivir en las residencias de la universidad, que son garantizadas por los primeros dos años.

“Creo que la universidad hace un buen trabajo de hacernos sentir seguros, pero esto…”, dijo Juster, refiriéndose al USC Trojans Alert, un sistema que contacta a los estudiantes cuando hay emergencia. “Me recuerda que necesito que quedarme dentro de los bordes de la universidad”.

Una carta electrónica del vicepresidente de asuntos estudiantiles de USC, Michael Jackson, a todos los estudiantes decía: “Este incidente ocurrió fuera de los vecindarios donde en los últimos años, hemos aumentado constantemente nuestra presencia, agregando docenas de cámaras de seguridad y para reconocer placas de matrícula, agentes uniformados y embajadores de seguridad con chaquetas amarillas”.

“Mientras que el crimen en nuestra comunidad es poco comparado con otras áreas de Los Ángeles, queremos asegurarnos de que hay esfuerzos para promover la seguridad en nuestros barrios alrededor de la escuela”, sostuvo en el parte de prensa.

El Departamento de Seguridad Pública de USC puso un puesto de mando cerca del lugar para vigilar el área. La universidad está ofreciendo una recompensa de $125,000 para quien ofrezca información sobre el asesinato.