Fue un mal año para Checo Pérez en McLaren

México.- Mala experiencia resultó para el piloto tapatío Sergio “Checo” Pérez sumarse a la escudería McLaren, pues aun cuando debió sacar el carácter y parecía que tendría mejor futuro en la Fórmula Uno, quedar lejos de pelear por el campeonato le cobró factura.

Este podría ser un año para el olvido, pero para el joven piloto quien en 2011 estuvo entre los 50 mejores del mundo según una revista deportiva británica, puede ser oportunidad para aprender de los errores y buscar consolidarse en la máxima categoría del automovilismo.

“Checo” no pudo cumplir con las expectativas tanto por el auto que le proporcionó McLaren que no estuvo a la altura de los MP4, como por la presión externa que vivió, y aunque se mencionaban algunos problemas con la prensa británica, lo cierto es que su llegada a Force India será intentarlo de nuevo.

Se trata de una escudería de la parte baja de la media tabla, bien dirigida por el indio Vijay Mallya, quien en su momento declaró que Pérez estará ahí “por méritos propios”.

Sergio Pérez tuvo este año posibilidades de pelear el campeonato, pero los test invernales en Jerez de la Frontera dieron el primer aviso y ya el equipo sabía que la situación no era confiable respecto al monoplaza.

“Checo” explicó que fue desilusión obtener esos datos, pero el ímpetu por comenzar la temporada se mantenía y aunque llegaban a Melbourne conociendo los problemas, los ingenieros intentaban una solución tras las primeras carreras.

12 puntos en las primeras cinco era menos de lo que había conseguido el año anterior con el segundo lugar en Malasia que le dio 22, y de cualquier manera no era suficiente para la casa británica.

Pero vendría Mónaco, donde la carrera traería más problemas para “Checo”, presionado por los resultados, aunque en su afán por salir adelante se vio el lado agresivo del piloto con un contacto que tuvo con el finlandés Kimi Raikkonen, quien lo llamó “idiota”, mientras el mexicano le respondió “estúpido”.

Lo comisarios aceptaron el incidente como un lance de carrera y no hubo sanción, pero vendría Canadá otro bache negro para el equipo donde ninguno de los dos pilotos lograba puntuar y terminaban con una racha de 64 carreras consecutivas lográndolo.

Silverstone no sería mejor, Sergio abandonaría por pinchadura y su compañero, el británico Jenson Button tampoco podía sumar unidades, la prensa local ya culpaba a Pérez y la presión hacia él era más que evidente.

Antes de la pausa de verano hubo mejoría con un octavo y noveno lugar en Alemania y Hungría, pero de nuevo McLaren no estaba donde se esperaba y no se sabía que hacer, el equipo regresaba en Bélgica pensando más ya en el próximo año que en rescatar este que se iba sin podios.

Después de irse con la manos vacías de Spa-Francorchamps y Monza, donde hacia un año había conseguido el tercer podio de su carrera, Sergio Pérez cerró el año sumando en seis de las siete carreras restantes, su mejor resultado un quinto puesto en el Gran Premio de India para finalizar con 49 puntos.

Sin embargo la suerte se le acabo al mexicano en la semana previa para el Gran Premio de los Estados Unidos, hizo oficial que no continuaría con el equipo, Woking le dio las gracias y la carrera para cerrar un asiento para la próxima temporada se volvió contra reloj.

Tal vez nunca estarán del todo claro los motivos y mientras el equipo británico se decantó por un novato danés, Kevin Magnusse.

Jo Ramírez, el experimentado mexicano que trabajo 40 años en la F1 y 18 años en McLaren como coordinador del equipo consideró que la arrogancia de su compatriota fue factor clave para su salida.

Ramírez insinúo que su trato con los medios y el poco entendimiento con la forma de trabajar con McLaren influyeron, aun así, Martin Whitmarsh, actual jefe del equipo lo apoyó para su llegada a Force India, valorando el talento de “Checo” en la pista.

El piloto mexicano mostró enfado y frustración considerando que lo mejor sería salir del equipo aunque su futuro en esos momentos era incierto y la escudería británica cerraba tras Brasil una de sus temporada más malas, sin ningún podio ni “poles”, algo que no se veía desde 1980.

Sergio tiene posibilidades para triunfar, y el potencial de volver a demostrar en un equipo considerado pequeño el coraje que tiene en la pista, ya lo consiguió con Sauber y ahora deberá tener una rápida adaptación al coche para poder ser confiable en carrera.

El reto es además con su compañero de equipo, el alemán Nico Hulkenberg quien ha sido un piloto muy codiciado por sus actuaciones este año en Sauber, sin embargo la falta de patrocinios le cerraron puertas con equipos grandes y mientras tanto, la batalla entre ellos se antoja interesante.