Estufa, calor en invierno: ¿cuál elegir?

Hemos ingresado de lleno a la estación más fría del año, el invierno, y como de costumbre hemos de prepararnos para que el exceso de frío no nos impida disfrutar de los momentos inolvidables con quienes más queremos. Para abrigarnos en exteriores contamos con ropa especial y diversos accesorios, para el interior de casa tenemos con la estufa. En muchos casos su uso es fundamental para sentirse bien en la estación fría.

Es importante elegir un calefactor que aparte de dar calor nos permita ahorrar dinero y no perjudique nuestra salud. Puedes renovar tu actual sistema, ampliarlo o elegir el mejor de todos desde un principio ayudado con la siguiente guía de características en sistemas de calefacción caseros.

Estufas eléctricas

Son seguras y limpias. Es ideal para espacios pequeños, personas enfermas y para la salud general de la familia. Si uno de los quemadores falla, existe una luz que avisa de la superficie caliente. Peligro de inhalar gas o residuos tóxicos no existe en este tipo de calefactores.

Eficiencia y ahorro. En general aprovechan mejor su fuente de energía, facilitando el ahorrar dinero, aunque dependamos del precio local de la electricidad. En caso de apagarse bruscamente un quemador, tienen un sistema de auto-apagado de emergencia. Las halógenas u oleoeléctricas traen regulador de intensidad a elección y cronómetro para programar exactamente el tiempo que quieres que esté encendida y cuándo ha de apagarse sola.

Fácil de limpiar. Dado que no usan combustibles como kerosene, leña u otro material que deje residuos, este tipo de calefactor es fácil de limpiar.

Fácil de transportar. Las eléctricas y halógenas suelen traer ruedas, haciendo sencillo transportarlas por la casa. No requiere de instalación.

Estufas a parafina o kerosene

Conveniencia. Algunas actuales pueden competir en ahorro de dinero con las eléctricas, dado su buen rendimiento en metros cuadrados con bajo consumo de parafina.

Más seguras. Varias incorporan encendido y apagado programable, además de un sistema que asegura el apagado instantáneo en caso de quedar poco combustible. Agregan un sistema que impide se derrame el kerosene.

Contras. Despiden un olor algo molesto, requiere cambio de mecha mensual, la limpieza requiere más tiempo y dedicación.

Estufas a gas

Calor radiante. Con sólo estar cerca del calefactor brinda una de las sensaciones más amplias de calor directo, lo cual las hace aptas para habitaciones más amplias.

Fácil de trasladar. También poseen ruedas, lo cual facilita mucho su traslado a pesar del peso del cilindro de gas que tenga instalado.

Contras. Va dejando residuos de gas (licuado o natural) en el ambiente fruto de su funcionamiento, lo que la hace menos apta para lugares pequeños o mal ventilados.

Estufas a leña o pellet

Potencia media. La leña calienta bastante, sin embargo la ubicación es vital, así como el tipo de material que la forme. Algunos evitan que irradie todo su potencial.

Contras. La instalación es cara y la energía no tan limpia. Aunque incorpore filtros y sistemas de doble cámara para aprovechar al máximo el pellet usado, siempre se expide al ambiente partículas de polvo y humo.

Consejos adicionales

Procura mantener una buena aislación habitacional, considera las mantas térmicas y usa bolsas de agua caliente al estar en la cama o sentado con un chal, así puedes disminuir el uso de la estufa.