Se declaran culpables de prostituir a jóvenes mexicanas
Las adolescentes mexicanas eran en su mayoría indocumentadas

El grupo de cuatro personas manejaban un burdel de Houston, Texas. Crédito: EFE
Ante una corte de Houston Texas, un grupo de cuatro personas, tres hombres y una mujer, se declararon culpables de participar en una red que prostituía a jóvenes mexicanas.
Los dos estadounidenses y dos mexicanos trabajaban con otras personas y manejaban un burdel de Houston, donde la mayoría de las jóvenes eran indocumentadas.
Amplía al respecto la agencia Notimex:
DALLAS. – “Los estadunidenses Abel Medeles, de 64 años de edad, y Odelia Hernández (45), y los mexicanos Eduardo Guzmán González (30) y Alberto Méndez Flores (25), formaban parte de una banda de 13 personas arrestadas tras el allanamiento en octubre pasado de varios bares y burdeles en Houston.
La Oficina del Procurador Federal para el Sureste de Texas informó que los cuatro se declararon culpables de conspirar para albergar a adolescentes indocumentadas utilizadas en el tráfico sexual y el blanqueo de dinero.
Como parte de su confesión, todos admitieron que trabajaban en “Las Palmas II”, una cantina ubicada en Houston y que conocían que en ese lugar se ocultaba, albergaba y protegía de las autoridades a indocumentadas y que los propietarios se benefician de ello.
Los cuatro aceptaron que como parte de su trabajo, ayudaron en la operación del negocio y facilitaron sustancialmente el ocultamiento, el albergue y la protección de las empleadas y clientes del negocio.
Las autoridades federales informaron que la banda fijaba los precios para tener sexo con las jóvenes indocumentadas, sobre la base de que tan joven y bonita era la adolescente.
Medeles, también conocido como “Chito”, estaba a cargo del estacionamiento del lugar y era responsable de alertar a los demás si la policía estaba en la zona.
Guzmán y Méndez administraban la cantina y pagaban a los propietarios del lugar 20 mil dólares cada semana con el dinero recibido de la operación de “Las Palmas II” y se quedaban con el resto de los ingresos.
El juez federal Ewing Werlein fijó para el próximo 10 de octubre la sentencia de Medeles y Hernández, mientras que Guzmán y Méndez serán sentenciados la próxima semana. Ambos en enfrentan una pena máxima de 10 años de prisión y una multa de 250 mil dólares.”