Cuando Eduardo Bermúdez salió de la camioneta Hyundai Tucson gris en la que acompañaba al conductor Ricardo Lara, lo hizo con las manos en alto y gritando que el arma que traía era falsa.
Así lo aseguran familiares de quienes la madrugada del domingo murieron al ser baleados por agentes del Sheriff en el Este de Los Ángeles.
De acuerdo a sus parientes, Lara, de 57 años, habría seguido las instrucciones de los alguaciles cuando les ordenaron detenerse.
Bermúdez, de 27 años, ya estaba en la acera con las manos en alto, pero habría hecho un movimiento brusco que los agentes consideraron una amenaza y fue ahí cuando descargaron sus armas en contra de los dos.
El Sheriff afirma que Bermúdez sacó de entre sus ropas una pistola con la que les apuntó. Después se confirmó que se trataba de una réplica.
El incidente surgió luego de que un hombre reportó al 911 que el pasajero de una camioneta gris le había apuntado con un arma cerca de la cuadra 1100 del bulevar Atlantic.
Una patrulla ubicó después la camioneta en la esquina de Verona y Hillview, con Lara y Bermúdez a bordo.
Las autoridades dijeron que continuarán la investigación como se hace con todos los tiroteos que involucran a agentes del Sheriff.
Sin embargo, tanto el padre de Bermúdez como la esposa de Lara rechazan la versión policíaca. Dicen que fue una acción injusta y criticaron el proceder de los agentes.
Rubén Bermúdez dijo que su hijo, alzó las manos ya recostado en el suelo, mientras que su hija, que fue testigo del tiroteo, pidió en repetidas ocasiones a los policías que no dispararan.
“No le dieron oportunidad, mi primo dijo que era falsa, nunca les apuntó, pero empezaron a dispararle, y también al otro señor que no traía nada en sus manos“, mencionó Alma Cabrera.
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Albania Morales soltó las lágrimas al recordar cómo los alguaciles mataron a balazos a Ricardo Lara, el hombre con el que vivió durante los últimos siete años. Confesó la rabia e impotencia que le produce recordar lo que observó desde su ventana, cuando —relató— desangrándose y en agonía Lara pedía auxilio ante la indiferencia de los agentes.
“Yo vi cuando cayó, él pedía ayuda, yo les gritaba que lo ayudaran, pero no hicieron nada“, dijo Morales.
Las familias de los occisos preparan demandas en contra del Departamento del Sheriff. “Porque lo que pasó fue una injusticia, lo que dice la policía es una gran mentira, él no merecía morir de esa forma“, agregó.
Man shot dead by deputies in East L.A. had replica handgun: Deputies shot one man dead in East Los Angeles whe… http://t.co/AAyD7IKyCk
— Social N Los Angeles (@SocialInLA) November 17, 2014
