La crisis lo llevó de ser un futbolista exitoso a vendedor de hot-dogs
Ángelo Padilla, quien en algún momento fue pretendido por la MLS, puso un carrito en las calles y ahora se gana la vida de esta manera
El fútbol guatemalteco vive una de las peores crisis en su historia, lo cual están resintiendo muchos futbolistas que militan en la liga profesional del país centroamericano, a tal grado que muchos han abandonado las canchas, olvidándose por completo de la fama y el fútbol, para dedicarse de lleno a otras cosas.
Ese es el caso de Ángelo Padilla, quien es una de las grandes figuras del balompié de Guatemala y quien por los problemas económicos que tiene el club Carchá, en el cual militaba, tuvo que retirarse momentáneamente de este deporte para dedicarse de lleno a otra cosa y así poder ganar dinero y mantener a su familia.
Ángelo decidio salir a las calles y ahora se dedica a vender hot-dogs, negocio al que ha decidido llamar “Shuco Gol” y que atiende en la vía pública y también, en eventos privados.
“Gracias a Dios, me fue muy bien en mi primer día. Vendí todo. Esta es una profesión que aprendí y que me gusta”, publicó Padilla en sus redes sociales.
A pesar de que su vida ha dado un giro radical, Ángelo no pierde la esperanza de que pronto le llegue alguna oferta del extranjero, pues hasta hace no mucho se dijo que varios equipos de la MLS estaban interesados en hacerse de sus servicios.