El ex concejal de Los Ángeles, Richard Alarcon, no se lo podía creen cuando escuchó el nombre del asesino de la masacre de Las Vegas. Él y Stephen Paddock compartieron patio de recreo en la Escuela de Primaria Fernangeles, ubicada en el Valle de San Fernando, donde este martes lucía una bandera a media asta.
“Estoy en estado de shock, como todos los demás, no entiendo por qué un niño americano promedio creciendo en su tiempo podría hacer algo así”, dijo a ABC7 Alarcon, “si tuviera que elegir a alguien en ese colegio que se volvería loco y mataría a un montón de personas nunca sería él”.
Más tarde, ambos jóvenes asistieron a la Escuela de Secundaria Politécnica y daban clase juntos de informática. “Era inteligente, muy inteligente y notable. La clase estaba llena de geeks, yo no sé cómo entré, pero el encajaba perfectamente en términos de inteligencia”, continuó Alarcon.
El padre de Paddock era un viejo conocido por la policía. Benjamin H. Paddock había atracado diversos bancos y escapado de la custodia federal, pasando a formar parte de la lista de los 10 más buscados del FBI.
“[El padre] nunca tuvo contacto con la familia, entiendo que este tirador tenía 10 años cuando [Benjamin] escapó de la cárcel a Texas”, relató a ABC7 Chuck Latting, ex agente del FBI que durante muchos años siguió la pista a Paddock, “estoy seguro de que el hijo sabía que había escapado, sabía que era un fugitivo, pero eso era todo”.
Hasta el momento también se sabe que Paddock se graduó de la California State University en Northridge, Valle de San Fernando. Las autoridades continuan revelando acontecimientos relevantes de su pasado con el fin de tratar de averiguar qué pudo motivar el asesinato de 59 víctimas inocentes.