Qué beber cuando estás deshidratado

Mantenerse hidratado regula la temperatura corporal, permite que tu corazón trabaje más eficientemente, previene dolores de cabeza y fatiga muscular, ayuda a la digestión e incluso mejora tu estado de ánimo. Pero en pleno verano, es fácil deshidratarse sin darse cuenta.

Es posible que sientas la tentación de probar una de las muchas bebidas deportivas o aguas con sabor en los estantes de los supermercados, pensando que son mejor para ti que el agua simple.

¿Cuál es la verdad? Los nutricionistas de CR revisaron con cuidado los tipos de bebidas de hidratación en el mercado. Aquí está su veredicto.

Bebidas deportivas

Estas fueron desarrolladas originalmente para los atletas empedernidos para reponer los electrolitos, como el sodio y el potasio, que se pierden en el sudor, además de los carbohidratos que los músculos utilizan como combustible. “El deportista promedio necesita reemplazar el agua, no los electrolitos”, dice Amy Keating, R.D., una nutricionista de CR.

Peor aún, las bebidas deportivas podrían contrarrestar los beneficios de quemar las calorías con ejercicio. “Una persona que pesa 150 libras quemará alrededor de 150 calorías en 30 minutos de caminata rápida, pero las bebidas deportivas pueden tener alrededor de 100 calorías en 16 onzas”, dice Keating. Las bebidas energéticas sin calorías y bajas en calorías tal vez no contengan azúcar (o menos cantidad), pero pueden tener edulcorantes artificiales. Y ambos tipos pueden tener colores artificiales u otros ingredientes añadidos.

Agua con vitaminas añadidas

No hay necesidad de reponer las vitaminas solo porque hace calor o te fuiste a correr. Y si tomas muchas de estas bebidas, corres el riesgo de sobrecargarte de vitaminas, especialmente si tomas una multivitamina o comes alimentos fortificados con vitaminas, como ciertos cereales. Además, lee las etiquetas; algunos productos están llenos de azúcares.

Aguas de plantas

Las etiquetas en ciertos tipos de bebidas con agua de coco, miel de maple o jarabe de nopal y otras aguas de plantas populares sugieren que estas bebidas son más hidratantes que el agua o una alternativa más natural a las bebidas deportivas. No hay mucha verdad en las afirmaciones de hidratación, pero sí son más bajas en azúcares. El agua de coco tiene aproximadamente de 40 a 65 calorías y de 9 a 14 gramos de azúcares en 8 onzas; las de cactus o nopal y miel de maple tienen aproximadamente 25 calorías y 5 gramos de azúcares en 8 onzas.

Té helado

Una infusión o té preparado en casa no tiene practicamente calorías y contiene antioxidantes que pueden mejorar la salud del corazón y reducir el riesgo de deterioro cognitivo y diabetes tipo 2.

Pero cuando viene en una botella, el té puede no tener ninguno de estos beneficios.

Muchos tés helados embotellados son nutricionalmente similares a los azúcares que contienen los refrescos y sodas. Los tés helados de dieta serán bajos en azúcares y calorías, pero pueden tener edulcorantes artificiales, como el aspartamo y sucralosa.

En vez de eso, busca tés helados etiquetados como “sin azúcar”. “Puedes agregar una cucharadita de azúcar o jarabe de agave y obtener mucho menos azúcar que en muchas versiones pre-endulzadas”, dice Keating.

Si quieres antioxidantes, prepara tu propia infusión. “El té embotellado tiene muy pocos antioxidantes en comparación con el té recién hecho”, dice Joe Vinson, Ph.D., profesor emérito de química de la Universidad de Scranton, cuyo laboratorio ha analizado una variedad de tés. Pero los antioxidantes se disipan con el tiempo. “Descubrimos que una vez preparado, el contenido de antioxidantes disminuía aproximadamente un 10% por día”, dice Vinson. Así que no hagas una jarra más grande de lo que puedas beber en un día o dos.

Alternativas caseras

Las aguas con sabor son una alternativa sana y sabrosa a las bebidas embotelladas. Comienza con una jarra grande de agua helada y agrega fruta en rodajas. O prueba la siguiente idea de Chad Luethje, chef ejecutivo de Red Mountain Resort en el suroeste de Utah.

Refresco de durazno y jengibre

Agrega 2 duraznos en cuartos (u otra fruta de hueso) y aproximadamente 2 pulgadas de raíz de jengibre pelada, finamente cortada. Llena la jarra con agua y revuelve suavemente. Agrega hojas frescas de verbena de limón o tallos de limoncillo, si lo deseas.

Nota del editor:  Este artículo apareció en la edición de septiembre 2018 de la revista Consumer Reports.

Suscribite al boletín de Noticias

Recibe gratis las noticias más importantes diariamente en tu email

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias!

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain