Honran a agentes que ayudaron a someter familias que buscaban asilo

La Patrulla Fronteriza instaló en México comandos tácticos con agentes de “operaciones extranjeras” contra las caravanas migrantes desde hace más de un año, reveló esa corporación en un comunicado.

La agencia del orden en San Diego reconoció que en octubre del 2018 instaló “un centro de comando táctico en Tijuana para coordinar esfuerzos estratégicamente”.

Según las autoridades, se trató de un esfuerzo conjunto con autoridades mexicanas, pero no mencionaron específicamente qué autoridades o departamento.

Ese comando de la patrulla en Tijuana se relaciona con respuestas como la del 25 de noviembre del 2018, cuando agentes en equipo antimotines dispararon granadas de gases contra grupos de migrantes que intentaban cruzar la frontera a entregarse para solicitar asilo en Estados Unidos.

Los doce patrulleros que integran el “Equipo de Operaciones Extranjeras” en Tijuana, elaboraron una lista de 51 abogados, periodistas y activistas a quienes calificaron de “instigadores”, o individuos que motivaban a familias migrantes a cruzar la frontera; según un reporte de la Oficina del Inspector General (OIG) que investiga asuntos internos del gobierno federal.

El  mismo comunicado subraya que el logro que consiguió ese primer centro táctico de la patrulla fronteriza en territorio mexicano “fue tan exitoso que esta asociación internacional fue citada como una gran práctica, y duplicada en otras partes de Estados Unidos hasta el día de hoy”.

La información fue divulgada en un comunicado el 4 de noviembre, cuando la Patrulla Fronteriza informó que el Departamento de Seguridad Interior (HSD) entregará reconocimientos en Washington este miércoles a los doce integrantes del centro estratégico en Tijuana y,  a otros dos oficiales de la patrulla fronteriza de San Diego.

Uno de los dos agentes adicionales a recibir reconocimiento estableció investigaciones globales y el otro proporcionó informes que permitieron a la patrulla someter familias que trataban de cruzar la frontera sobre el muro, sin alterar las operaciones regulares en las garitas.a condena.

Cerca de un centenar de desconocidos reunidos en el Parque de la Amistad cantó a la cumpleañera las mañanitas, su papá le hizo llegar una muñeca con extraño cabello rosado en trenzas, y un Buzz Lightyear.

La abuelita, Maribel López, le horneó docenas de pastelitos de colores, y su mamá, Nicole Estíbalis, le compró un broche nuevo de cabello y la cargaba cuanto quisiera.

La pequeña sin embargo seguía un poco triste.

Un rato después, cuando la comunidad musulmana llegó a orar a la frontera, un niño de la misma edad que Remesme supo que era cumpleaños.  De repente, el pequeño, con su espontaneidad infantil corrió para darle un par de abrazos a la festejada.

De repente todo cambió.

Y aunque el rostro de la menor no dejó de reflejar una soledad difícil de describir y aparentemente profunda, el peso de la tristeza parecía suavizarse con la presencia del pequeño.