Padres le dan malas calificaciones a Biden y urgen mejor liderazgo para invertir en las escuelas

Se pide que los fondos vayan directamente a los niños y que haya un mecanismo que revise el progreso de cada alumno

Todos los niños de primer grado tendrán acceso a una cuenta de ahorros para ir a la universidad./ Foto: Getty.

Todos los niños de primer grado tendrán acceso a una cuenta de ahorros para ir a la universidad./ Foto: Getty.  Crédito: Getty Images

Los padres de familia no están satisfechos con la manera en la que el Presidente Biden y su administración han manejado la educación durante la pandemia y esto debería ser una llamada de atención para los demócratas en 2022.

Una nueva encuesta publicada por el Sindicato Nacional de Padres, muestra que el 32% de los padres de familia le dan al Presidente Biden una calificación reprobatoria en cómo está manejando la respuesta de la educación pública hacia la pandemia. Entre independientes, el Presidente Biden tuvo un desempeño particularmente deficiente con el 35% dándole una “F” y solo el 11% dándole una “A.”

El Secretario de Educación, Miguel Cardona, también tuvo dificultad en obtener buenas calificaciones de los padres con el 38% dándole una “A” o “B” y el 44% diciendo que se merece una “C”, “D” o “F.

Darle apoyo a las familias que buscan una educación de alta calidad no debería ser controversial. 

Desde marzo del 2020, nuestros niños y nuestras familias han sufrido los efectos desastrosos que ha tenido la pandemia debido a un abandono flagrante de liderazgo a nivel local, estatal y nacional en el sistema escolar en Estados Unidos.

A pesar de los $122,000 millones distribuidos a los estados como parte del Plan de Rescate Americano, el 51% de los padres aún no han recibido mucha -y a veces ninguna- información acerca de cómo los fondos federales adicionales para las escuelas están siendo utilizados.

La mayoría de los padres opina que los fondos deberían usarse para hacer cambios radicales en la educación pública, ya que están frustrados sobre la regresión de aprendizaje y cómo el COVID ha afectado la salud mental y el bienestar emocional de sus hijos.

Por eso, el septiembre pasado, el Sindicato Nacional de Padres, comenzó una nueva iniciativa, Everyday Parents Impacting Change, (EPIC, por sus siglas en inglés) para proveer a familias con recursos y para que las juntas escolares sean obligadas a rendir cuentas de cómo han usado las inversiones federales

Recientemente, la profesora de la universidad de Georgetown y directora de Edunomics Lab, Marguerite Roza, dio luz a las noticias acerca de la cantidad de fondos federales (ARP- ESSER) que el Superintendente de Instrucción Pública del Estado de California, Tony Thurmond, y otros funcionarios recibieron. La cantidad es astronómica y sin ningún plan enfocado para guiar las decisiones de gasto para poder cumplir con las necesidades de los estudiantes.

En este momento crucial, se necesita liderazgo más que nunca por parte de nuestro presidente, el secretario Miguel Cardona y los funcionarios encargados de manejar estos fondos que deben ir directamente a los niños. Se necesita delinear objetivos y crear mecanismos para que los distritos realicen un seguimiento del progreso mes por mes donde cada niño se beneficia de esta inversión sin precedentes.

Hay mucho por hacer. Necesitamos planes para proporcionar apoyo e instrucción adicional en este momento y en el verano para los niños en distritos que más lo necesitan; necesitamos asegurar que los niños más pequeños estén leyendo a su nivel académico; necesitamos que los adolescentes estén preparados para graduarse de la secundaria y necesitamos que las escuelas involucren a los padres de familia en el desarrollo e implementación del presupuesto escolar para que los planes sean claros y transparentes para todas las familias.

Nunca más tendremos la oportunidad de invertir en los niños de esta manera. Que no se desperdicie este momento.

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