“Nos ordenaron seguir”, Gabriel Lerner agradece el apoyo a La Opinión

Fueron centenares, y tenían que serlo para dar cabida a la diversidad de aquellos cuyas vidas han sido tocadas por La Opinión en sus 90 años de existencia. Eso sí: no estuvieron todos, porque la sala ya no daba para más: en las últimas semanas un torrente de interesados en celebrar con nosotros se desató y no pudimos satisfacer a todos.

Pero los más de 400 que atiborraron el emblemático hotel Biltmore alcanzaron para representar a la comunidad que hemos estado sirviendo desde 1926: los latinos de Los Ángeles y el sur de California.

Estuvo la gente del pueblo, a través de sus organizaciones; nuestros patrocinadores, que nos ayudan a salir todos los días; los servidores públicos, funcionarios electos y líderes del estado, que deben trabajar incansablemente para mejorar la vida de la población; nuestros compañeros de trabajo, empleados actuales y pretéritos, desde los reporteros, editores y diseñadores, a los dedicados de Digital, Ventas, y Administración y Sistemas, sin los cuales no existimos.

La situación dramática del país y el peligro que podría cernirse sobre la comunidad inmigrante se reflejaron en extraordinarios discursos, en arengas y en promesas de resistir y estar unidos. No podía ser de otra manera. Ello contribuyó a que el evento fuera histórico.

Así, se pasó revista a nuestro origen y pasado, honrar a la familia fundadora Lozano, reconocer a nuestros futuros periodistas y líderes, agradecer a las organizaciones comunitarias a las que ayudamos a ayudar a nuestra gente.

Con su presencia, nuestros huéspedes reconocieron la trayectoria de La Opinión con la comunidad y nos legaron, nos ordenaron seguir adelante, sirviendo, el servicio del periodismo.

Lo haremos.