Acusado de matar a bebé se declara no culpable en corte
Brandon Barnes, de 19 años, fue instruido ayer de cargos
SAN BERNARDINO, California
. Un hombre acusado de disparar al menos una docena de balas en una casa del Sur de California que asesinó a una niña de 3 años e hirió a una mujer embrazada y a su pequeña hija se declaró no culpable ayer.
Brandon Barnes, de 19 años, presentó una declaración por los cargos de homicidio e intento de homicidio en el tiroteo ocurrido el lunes por la noche en San Bernardino. Las autoridades afirman que Barnes disparó luego de que un residente hombre interviniera más temprano ese día cuando vio al sospechoso golpear a una mujer fuera de un negocio cercano.
Barnes fue arrestado el miércoles a las 5 p.m. cuando andaba en su bicicleta a dos cuadras de la escena del crimen. La policía no ha recuperado el arma.
Cuando el tiroteo había finalizado, la nieta embarazada de Sophia Cardona y su bisnieta de 3 años fueron hospitalizadas en estado crítico y otra pequeña familiar murió de una herida de bala en la cabeza.
“El esposo de mi nieta, él intentó ayudar a la mujer y por ayudarla sucedió esto”, dijo el jueves Cardona. “En ocasiones no se puede ayudar a nadie, especialmente si no se sabe cómo es la persona”.
Nylah Franco-Torres, de 3 años, fue declarada muerta después del tiroteo.
La policía se negó a divulgar los nombres de las víctimas supervivientes, pero Cardona identificó a la mujer embarazada como su nieta de 21 años, La Donna Howie, y a la hija de Howie, Justine Aguilar.
La hija de Howie, que también recibió un disparo en la cabeza, se encuentra en un estado de coma inducido debido a la inflamación cerebral, indicó Cardona. Responde a las personas moviendo su mano, dijeron las autoridades.
El ataque fue uno de los cuatro tiroteos ocurridos en San Bernardino entre el lunes de noche y el martes de mañana, y marcó el final luego de más de dos meses sin homicidios en la ciudad del desierto ubicada a 60 millas al este de Los Ángeles.
Michael Ramos, fiscal del distrito, calificó al tiroteo como “horrendo” y un “acto cobarde”, y prometió justicia en el caso. “No permitiremos que esto le suceda a nuestros ciudadanos, especialmente a nuestros bebés”, afirmó.
Samra Roth, defensor público, no devolvió de inmediato una llamada telefónica que se le hizo.
La fianza de Barnes se estableció en 2 millones de dólares y se le ordenó regresar ante el tribunal el 26 de septiembre, indicaron los fiscales.
Los registros del tribunal indican que Barnes tenía una orden de arresto pendiente por un cargo por el delito menor de merodear cerca de una escuela. Fue arrestado por alegatos de disparar en un lugar público hace un año, pero el caso fue desechado después de que Barnes llegara a un acuerdo sobre la declaración de culpabilidad.
