Crece presión contra KFI por ‘John y Ken’
Grupos exigen que locutores sean retirados; estación aun los defiende
Activistas proinmigrantes alertaron que un episodio como el ocurrido en Tucson, Arizona, el pasado 8 de enero, donde murieron seis personas y fue herida la congresista Gabrielle Giffords, pudiera ocurrir en Los Ángeles.
Y es que, según representantes de organizaciones latinas, locutores de radio están promoviendo el odio racial.
Grupos como LULAC, La Raza, CHIRLA y MAPA son parte de una campaña en contra del programa “John and Ken” que se transmite por la estación de radio KFI 640 AM y es conducido por John Kobylt y Ken Chiampou, a quienes acusan de mantener un discurso racial y de odio en contra de los latinos.
En una protesta realizada ayer frente a la estación de radio ubicada en Burbank, indicaron que ya cinco compañías se han retirado como anunciantes del programa de radio: VONS, Ralphs, AT&T, Verizon y una compañía más pequeña que pidió no dar el nombre por temor a represalias de los mismos locutores.
Los activistas han hecho una sóla demanda al respecto: el despido de los locutores.
Pero la gerencia de KFI ha manifestado su interés en apoyar a sus locutores con el argumento de la libertad de expresión, por lo que no los despedirá y por el contrario los mantendrá al aire dándoles todo su apoyo.
“Expresar su opinión no es motivo de despido”, señala un comunicado emitido por la estación KFI.
Ayer mismo representantes de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC), del Consejo Nacional de La Raza, de la Asociación Política Mexico-Americana (MAPA), de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes en Los Ángeles (CHIRLA) y de la Coalición Nacional de Medios Hispanos (NHMC), se reunieron con el gerente general de la estación, Greg Ashlock, quien les insistió que se trataba de un asunto de libertad de expresión.
“John y Ken se están escondiendo en la Primera Enmienda y están satanizando a la comunidad latina”, comentó David Rodriguez, portavoz de LULAC.
Los ataques a la comunidad latina por parte de estos dos locutores ya llevan tiempo, pero la campaña la han iniciado por el reciente caso en el que deliberadamente distribuyeron a sus radioescuchas el teléfono celular de Jorge Mario Cabrera, vocero de CHIRLA, quien recibió más de 400 mensajes de odio.
“Le mencionaron no sólo la madre, sino que hasta recibió amenazas de vida, con eso ya se pasaron”, mencionó Alex Nogales, presidente de la NHMC.
“No queremos en California otro caso como el de Giffords”, dijo Nativo López, director de MAPA en referencia a que también el asambleísta Gil Cedillo ha recibido también toda clase de improperios por parte de extremistas. “Lo que queremos es que los despidan, estamos aquí para sacar a estos bueyes de la barranca”.