Reaccionan pinoleros y chapines
Pinoleros y chapines radicados en Los Ángeles manifestaron su repudio y apatía ante los procesos electorales que ayer se llevaron a cabo en sus respectivos países, Nicaragua y Guatemala.
Los nicaragüenses reprocharon las polémicas elecciones de su país ante la insistencia del actual presidente Daniel Ortega para reelegirse, mientras que los guatemaltecos mostraron indiferencia ya que consideran que el país no tiene futuro de cambio.
“Estoy al tanto de las elecciones; según dicen va adelante Ortega, pero yo creo que es porque el gobierno no hace las cosas limpias, tiene todo a su favor, las casillas ya las tiene premeditadas”, comentó Carlos Mata.
Aseguró que Daniel Ortega sería el triunfador, pero no por la decisión del pueblo, sino porque se trata de un proceso electoral manipulado. En Nicaragua, acusó, a la gente la obligan a tener una cartilla de sandinista para que pueda recibir servicios médicos.
Sentado en una mesa del restaurante LA 27th, rincón tradicional de reunión de pinoleros, Francisco Maltez se terminó su platillo de baho para opinar:
“Es inconstitucional lo que está haciendo Ortega, es la ley del más fuerte, como decimos los nicaragüenses, el que tiene más galío traga más pinol”, dijo desilusionado. “Son elecciones amañadas. Sería un milagro que ganara la oposición”.
Por su parte, Wilfredo Bonilla, originario de Managua, dijo que en su país no hay democracia porque se roban las elecciones. “La Constitución en Nicaragua no vale para nada”, dijo.
El guatemalteco Heriberto Alfonso Chún, dijo haber estado en comunicación con su familia en Guatemala y la constante es que la gente casi no ha salido a votar. Ese ausentismo, dice, es porque el pueblo cree que todo el tiempo es lo mismo, prometen y prometen y no hacen nada.
“Mi papá me dijo que la gente no está llegando mucho a las urnas a pesar de que hay un clima cálido y sin lluvia”, mencionó.
Chún, quien vive en Los Ángeles desde 1985, dijo que su pueblo siguen existiendo las dos mismas escuelas públicas que había cuando emigró.
“El gobierno no ha hecho ni una más. ¿Dónde está el dinero? Sólo endeudan más el país, no se puede esperar mucho ni de uno ni de otro”, reclamó.
Para Mirna López, del departamento de Izabal, la apatía de la gente al no acudir a las urnas es porque ya no cree en los políticos.
“Lo que esperaríamos es que el país cambie”, comentó, “pero la verdad no hay fe de cambio. La gente ya no va a votar porque siempre es lo mismo”.
Doña Nivea Galindo, de 75 años de edad, a pesar de que a ella le tocó la guerra civil en Guatemala y la represión de los militares, ella está a favor de la mano dura que ofrece el candidato Otto Pérez.
“Por lo que se ve Otto Pérez es quien va a ganar, y yo creo que está bien, porque se necesita una mano dura en Guatemala, a como está la situación sí se necesita la mano dura”, opinó.