Reviven tradición de Día de los Muertos
La crisis económica afecta la venta de flores y veladoras este año
René Cedillo vendió 100 en lugar de 500 fajos de flor de zempasuchitls que regularmente se agotan en el fin de semana previo a la celebración del tradicional Día de los Muertos.
Mientras Herzon Rico, su vecino en el mercado de las flores en el centro de Los Ángeles, espera que los vivos se acuerden de sus muertos y durante lunes y martes, vengan por las flores que adornan una de las tradiciones mas legendarias de los mexicanos.
Por otra parte, desde Pacoima, en su botánica Santo Niño de Atocha, Angélica Rodas, tiene a la mano veladoras, santos e inciensos que para los días primeros de noviembre, sus clientes buscarán para recordar a sus dolientes, aun cuando, comenta, la crisis y las preocupaciones de los vivos esta compitiendo fuertemente con el recuerdo de los muertos.
René, de Toluca, México, ve con desencanto el desplome de las ventas en su negocio de flores. “Las florerías dependemos de las tradiciones de los mexicanos y si dejamos de celebrar, estamos abandonando algo muy preciado para nuestra gente”, asegura, explicando que este año, bajó hasta en un 50% por cierto los precios de arreglos florales como cruces y coronas para honrar a los difuntos.
“Esta cruz el año pasado la podía vender hasta en 160 dólares”, apunta René a un arreglo de crisantemos blancos y rosas rojas, “ ahora ni a 80 dólares la podemos vender”.
A una calle de distancia, Herzon Ricco, de Cuautla, Morelos, México, lleva más de diez años en la industria de la flor y dos de propietario de su local.
Herzon espera que hoy y mañana los clientes se acerquen por lo menos por un ramo de zempasuchitls que ofrece a 2 dólares con 50 centavos. “Para que ningún difuntito se quede sin su flor”.
Pese a todo, comparte su preocupación con René, porque los meses de febrero (por el día de San Valentín), mayo (por el Día de las Madres), noviembre (Día de Los Muertos) y diciembre (Día de la Virgen de Guadalupe), mantienen viva la industria de las flores. “Si este día ha sido flojo, esperemos que no sea lo mismo en las otras fechas”, apunta, insistiendo en la idea de que de último momento se dispare la demanda floral.
A su vez, Angélica Rodas, de Amatitlán, Guatemala, que tiene su botánica en un barrio predominantemente mexicano, justifica la aparente falta de interés en el Día de Muertos: “Pobrecitos los que estamos aquí seguimos sufriendo, nuestros muertitos ya están descansando en paz”.
“En estos días, lo que yo he visto, es que la gente está mas preocupada por el trabajo y la crisis que los ha golpeado y no es que dejen de querer (a sus difuntos), sino que sus necesidades para salir adelante, son cada vez más”.