Espera a Messi

TOYOTA, Japón (EFE).- Neymar aprovechó su debut en el Mundial de Clubes para anotar un golazo que perfiló el triunfo del Santos sobre el japonés Kashiwa Reysol (1-3), lo que permite al club brasileño jugar la final del torneo el próximo domingo.

Santos enfrentará al ganador del partido de hoy entre el Barcelona, monarca europeo, y el Al Sadd catarí, ganador de la Liga de Campeones asiática.

Brasileños y nipones saltaron ayer al Estadio Toyota decididos a llevarse la victoria y el juego inició a un ritmo muy rápido.

Neymar, consciente de que era una ocasión única para deslumbrar a nivel internacional, tardó apenas cinco minutos en mandar un primer disparo al palo.

El Kashiwa no se amilanó y se acercó por conducto de Leandro Domingues, que mandó un zapatazo desde el borde del área a las manos de Rafael.

Mientras, el once del Santos comenzó a deslumbrar con un puñado de regates y caracoleos en la medular, ya que los marcajes férreos y alguna dura entrada rival lo mantuvieron alejado del área unos minutos.

Eso fue hasta que la joven estrella decidió que su momento había llegado; el de demostrar al mundo el por qué muchos lo consideran un jugador llamado a convertirse en uno de los mejores del planeta.

Fue al minuto 19 cuando el “11” agarró un balón al borde del área, sentó a su marcador con un recorte eléctrico y mandó un obús, colocado, imparable, a la escuadra derecha de Sugeno, que puso al Estadio Toyota de pie y que pasará a los anales de la historia de esta justa.

Cuando se le preguntó al final del juego si su gol debería figurar entre los candidatos a “Mejor Gol del Año” de la FIFA, optó por la humildad y, tras soltar una carcajada, dijo: “No sé”.

Consagrada la figura de Neymar en el partido, el Kashiwa prosiguió en sus intentos por anotar con sus delanteros, Tanaka y Kudo, muy activos en la disputa de cada balón con la defensa rival.

Por desgracia para los nipones, el Santos volvió a marcar a los 24 minutos en una jugada muy similar a la del primer gol, pero ejecutada desde la izquierda del área, donde Borges se libró con habilidad del central y cruzó la pelota, ahora a la izquierda del meta.

El veterano delantero “peixe” celebró con una alegre pirueta, mientras la enardecida “torcida jovem”, presente en el estadio, se veía ya en la final de Yokohama del domingo.

En la reanudación, Danilo erró un cara a cara con el guardameta nipón Sakai, y el Santos empezaba a dar la impresión de que podría endosarle una goleada al campeón de la J.League.

Pero el Kashiwa logró que Sakai cabeceara al fondo de las redes un córner desde la derecha, al 54′, para el 2-1.

En ese momento, Neymar optó por meterse de nuevo en el partido y metió la puntilla con el punto de mira puesto en la portería de Sugeno, lo que envalentonó al resto de sus compañeros.

La insistencia brasileña volvió a rendir frutos cuando una falta cometida fuera del área permitió a Danilo mandar un preciso lanzamiento al fondo de la red nipona a falta de 27 minutos para el final del juego, para sellar el marcador 3-1.

Neymar dijo ayer, tras el triunfo sobre e Kashiwa Reysol, que las expectativas depositadas sobre él en su estreno en el Mundial de Clubes no le crearon ningún problema porque, para él, “la presión es un placer”.

“No tengo esa impresión, pese a que esto sea un Mundial”, respondió el jugador “peixe” al ser preguntado sobre si la atención puesta por los medios con respecto a su debut le había resultado excesiva.

“Si el Barcelona juega con nosotros la final, esperamos hacer un buen partido”, explicó con respecto a la posibilidad de que los blaugranas, favoritos hoy en la otra semifinal, avancen al partido por la Copa.

“Ha sido un estreno con victoria, eso es lo más importante, y estoy muy feliz”, comentó el delantero de 19 años.

El técnico del Santos Muricy Ramalho, no se sorprendió de que Neymar, que marcó un gran gol en la victoria sobre el Kashiwa Reysol, anotara de esa manera porque lo “hace habitualmente en Brasil”.

“Creo que Neymar está creciendo y hoy [ayer] anotó como lo hace habitualmente en Brasil”, dijo el preparador en la rueda de prensa posterior a la primera semifinal del Mundial de Clubes de Japón, que se disputó en el Estadio Toyota de la provincia de Aichi.

“Que jugadores como Borges, Neymar o Danilo marquen golazos así no es ninguna sorpresa porque normalmente lo hacen en Brasil”, insistió Ramalho.