Hurtados en LA; hallados en el exterior
Miles de autos robados aquí son trasladados a México, Asia, Sudamérica y Medio Oriente
Un coche desmantelado en un taller clandestino descubierto en el condado angelino. Crédito: Suministrada / Departamento del Sheriff de LA.
Un residente de Los Ángeles puede enterarse una manaña que su coche desapareció de la entrada de su vivienda y volverlo a ver meses o años después con varios impactos de bala en un depósito de Tijuana.
O le pueden robar un deportivo de más de 100,000 dólares que jamás tuvo en su poder. Estos vehículos, que son adquiridos a través del fraude de identidad y trasladados vía marítima en contenedores, suelen recuperarse en lugares tan lejanos como Asia, Sudamérica, el Medio Oriente o México.
“Para cuando la financiera le envía una carta indicando que no se han enviado los pagos y la víctima responde que nunca lo compró, el coche ya salió del país”, comentó Leonard Rivas, sargento del Sheriff y parte del Destacamento Especial Regional para la Prevención del Robo de Autos (TRAP), referente al método que ahora utilizan las células en esta ciudad de bandas internacionales.
Conforme los avances tecnológicos dificultan la práctica tradicional de este delito, los ladrones buscan procedimientos cada vez más sofisticados para evadir el brazo de la justicia. De ahí que Los Ángeles aún sea considerada “la capital mundial del robo de autos”, por los 43,403 vehículos que fueron hurtados en 2010, más que en las ciudades de Nueva York y Houston juntas.
“Hemos recuperado muchos coches siendo trasladados en buques hacia otros países. Unos son robados de las calles, pero muchos son comprados con identidades falsas, que es ahora la principal tendencia”, explicó el sargento Rivas. “Hay mucho dinero de por medio cuando hablas de autos que valen más de 100,000 dólares, como Mercedez Benz y coches de ese estilo”, mencionó.
La Oficina Nacional de Crímenes contra Aseguradoras (NICB) reporta que muchos de estos delincuentes operan en comunidades cercanas a las fronteras o los puertos. Por ello, en 2010, los estados sureños congregaron el 36.9% de todos los robos de autos, según la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).
Como se retrató al estilo hollywoodense en la película “Gone in 60 seconds”, algunos de los vehículos de lujo son robados por encargo y enviados por barco. a menudo a Sudamérica, Asia y al Medio Oriente. Se sabe que los pandilleros actúan en grupo, mientras que los ladrones profesionales, con contactos dentro de la industria, generalmente trabajan sin compañía.
Los coches de menos valor se quedan para ser desmantelados en talleres clandestinos, se utilizan para cometer crímenes, son vendidos a muy bajo precio con registros falsos o alterados del Departamento de Vehículos de California (DMV) o llevados ilegalmente a México.
De ese país fueron “repatriados”, como se conoce el proceso de reclamo de un auto estadounidense robado, alrededor de 13,400 vehículos de 2007 a 2010; la gran mayoría fueron detectados en Tijuana.
En esa ciudad, apenas en 2009 abrió un corralón para almacenar los carros recuperados por las autoridades mexicanas y ya hay más de 3,000 unidades en espera para cruzar la frontera, reporta NICB.
Muchos de éstos son identificados por las aseguradoras en un plazo no mayor de cinco días; sin embargo permanecen ahí por meses o incluso años. Los impactos de bala en cristales y carrocería de algunos son prueba de que fueron usados en actividades criminales.
“Lo que puede retrasar el proceso es cuando un vehículo estadounidense robado se involucró en un delito en México y las autoridades mexicanas tienen una investigación en curso”, aclara John Acuña, agente especial del NICB, en un video difundido por esa entidad.
La Oficina Nacional de Crímenes contra Aseguradoras no autorizó que La Opinión conversara con los responsables de su programa de repatriación de coches, ni visitar sus oficinas centrales en Chula Vista, argumentando que era inseguro para éstos, quienes también trabajan en territorio mexicano.
Pete Moraga, vocero de la Red de Información de Aseguradoras de California, indicó que las cámaras de vigilancias instaladas en la frontera ya permiten identificar los vehículos que salen del país ilegalmente, por medio de la lectura automática de placas. Pero también se registran aquellos usados en fraudes.
“También hay personas que no pueden pagar las mensualidades de los coches y los llevan a México, los venden y después reclaman que se los robaron. Esas cámaras ayudan a detectar los fraudes”, dijo.
La industria de seguros automotrices ve con preocupación que, si bien el robo de vehículos a nivel nacional bajó un 7.4% de 2009 a 2010, apenas uno de cada diez reportes fueron resueltos el año pasado.
California, líder en este delito, registró 152,524 robos, sumando pérdidas por 746 millones de dólares. Casi el 25% de éstos fueron robados en Los Ángeles. Los más buscados por los ladrones continuaron siendo los coches japoneses de modelos de la década de 1990.
“A veces se recuperan en poco tiempo, pero en ocasiones nunca los encontramos”, dijo el sargento Rivas.
