Reviven el pasado de los tranvías de Los Ángeles

Ha comenzado un movimiento para llevar nuevamente los tranvías al centro de LA.

Una ilustración de Los  Ángeles Streetcar Inc. muestra la línea propuesta de tranvía en su ruta frente al Centro Staples.

Una ilustración de Los Ángeles Streetcar Inc. muestra la línea propuesta de tranvía en su ruta frente al Centro Staples. Crédito: AP

Medio siglo después de que el último de los tranvías rojos de la desaparecida Pacif Electric recorriera Los Ángeles, ha comenzado un movimiento para llevar nuevamente los tranvías al centro de LA.

Con una ruta elegida por la ciudad y la revisión ambiental ya comenzada, el recorrido de cuatro millas propuesto desde Broadway a Figueroa es un proyecto modesto en comparación con las extensiones del subterráneo en la región y las ampliaciones de las autopistas, pero ofrecería un vínculo entre lugares claves del revitalizado centro y un vínculo simbólico con el legendario pasado de la ciudad.

Los Ángeles llegó a tener mil millas de vías para tranvías.

Entre ellas estaba la Línea Amarilla y la más conocida Línea Roja, y desde que le dejaron el lugar a las autopistas a comienzos de la década de 1960 se han convertido en un símbolo de la intimidad e identidad perdidas de la ciudad, celebrada por políticos que buscan recuperar el esplendor en el tránsito y mediante películas como ¿Quién engañó a Roger Rabbit?

Mientras que los tranvías del pasado son recordados con frecuencia -la línea de trenes ligero Expo que se inaugurará el sábado tiene boletos de los tranvías rojos grabados en el hormigón en la parada final y en un recorrido de prueba reciente los líderes de la ciudad compartieron recuerdos de cuando anduvieron en los tranvías- el proyecto céntrico propuesto sería una restauración mucho más directa, comenzando con la ruta en sí.

“Prácticamente todos los tramos del recorrido están en las calles que históricamente tuvieron las líneas Roja o Amarilla”, dijo Robin Blair, director de planificación de la Autoridad Metropolitana de Tránsito.

Aunque quienes apoyan el proyecto señalan que los nuevos tranvías serán completamente modernos, de líneas elegantes y ecológicos, la nostalgia es el mayor argumento emocional a favor.

“Todos tienen una historia propia o de sus padres o alguna otra persona cercana que anduvo en los tranvías”, dijo José Huizar, concejal de la ciudad, cuyo plan “Recuperar Broadway” en 2008 comenzó el movimiento.

Broadway fue en un momento la calle con más movimiento y vida en el centro de la ciudad, y luego se convirtió durante décadas en un símbolo del deterioro del centro.

El plan de 36.5 millones de dólares de Huizar busca revivir las salas de cine y los clubes nocturnos que están abandonados.

Parece estar funcionando, y la línea de tranvías podría hacer que la recuperación sea completa.

“Es un recorrido hermoso”, dijo Huizar. “Está ubicado en un lugar perfecto”.

El Hotel Ace, un lugar clave para jóvenes a la moda en Portland, Palm Springs y Nueva York, sorprendió a muchos observadores de la ciudad en diciembre cuando, para su sucursal en LA, desechó vecindarios más burgueses por un sórdido sitio en Broadway. El hotel se ubicará en el United Artists Theater y en el edificio de oficinas sobre la sala.

El hotel Ace se unirá a otros lugares a la moda como Los Ángeles Brewery y Umamicatessen, donde personas refinadas y otras no tanto pueden cenar donas de foie-gras y papas fritas con seso de cerdo al alioli.

“Es una de las partes de la región más brillantes, donde las personas realmente están desarrollando cosas”, dijo Blair.

Se pueden encontrar sistemas de tranvías similares en toda Europa y en ciudades de EEUU como Portland, Seattle y Pittsburgh, y se espera que se inaugure una línea en Washington, D.C., el próximo año. Y gracias a Tennessee Williams y a Marlon Brando, son los más asociados con New Orleans y su Un tranvía llamado deseo.

A diferencia de los trenes ligeros más comunes en el transporte público, los tranvías funcionan más cerca del suelo, en vías poco profundas, con el flujo regular del tráfico.

Debido a que hay pocos obstáculos y se mezclan tanto con los automóviles, bicicletas y transeúntes, a veces plantean inquietudes con respecto a la seguridad, pero quienes los apoyan dicen que no son más peligrosos que los autobuses, y que en todo caso son más seguros porque tienen recorridos y paradas predecibles.

El tranvía de Portland se ha convertido en un modelo para LA, y una visita de Huizar ayudó a convencerlo de la idea.

A Huizar le preocupó ver a los trenes moverse con tanta libertad en el tráfico y acercarse tanto a la acera, pero se convenció rápidamente cuando subió y viajó sin problemas en un tranvía lleno de gente.

“Es como trasladarse en una escalera en la acera”, dijo el concejal, “y no había muchos asientos”.

La ruta propuesta se dirige al sur desde la Calle Primera por Broadway, luego da la vuelta y se dirige al norte pasando por Staples Center y un posible estadio de la NFL que continúa en las etapas de planificación y definición política, antes de finalizar cerca del Museo de Arte Contemporáneo.

“La idea cuando comenzamos con este proyecto era conectar todos los destinos importantes en el centro”, dijo Huizar.

A pesar de cubrir una distancia muy corta, el recorrido funciona como un paseo por todos los niveles económicos de LA, desde el Ritz-Carlton a Skid Row.

“Parte del recorrido de la línea es muy denso, con mucho tráfico, y parte de la ruta necesita un buen incentivo para atraer inversionistas”, dijo Paul Habibi, profesor de negocios de UCLA, director del proyecto.

Se espera que la revisión ambiental que se está realizando tarde aproximadamente un año, y que las obras comiencen en 2014 y se completen en 2016.

El dinero, en un momento en que las ciudades están teniendo grandes dificultades, es el mayor obstáculo potencial. Las estimaciones de los costos varían entre 110 millones de dólares y 125 millones.

Ya se recaudaron diez millones a través de fuentes de la ciudad. Los partidarios del proyecto esperan que la mitad del resto de los costos se cubra con subvenciones federales, pero primero deben aprobar un impuesto local para dueños de propiedades cerca del recorrido. Requeriría la aprobación de dos tercios de unos 7,000 votantes registrados.

Los organizadores del tranvía saben que deberán trabajar para convencer a los comerciantes y propietarios de que obtendrán un buen retorno de su inversión, y esperan tener una economía más fuerte cuando el asunto se presente a votación en 2013.

“Hemos estado haciendo nuestra tarea y hemos hablado con los dueños de propiedades”, dijo Huizar. “El impulso está allí y queremos aprovecharlo”.

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