Rechazo al extremismo conservador
Las elecciones de 2012 pasarán a la historia no sólo como la histórica reelección del presidente Barack Obama, sino también como un rechazo absoluto de los votantes al extremismo conservador. La estrategia del Partido Republicano de congraciarse con grupos ultra conservadores le costó las elecciones presidenciales y podría tener consecuencias para los republicanos en los comicios legislativos del 2014.
Los republicanos todavía no salen del shock que les provocó la reelección de Obama. Perdieron el voto popular y del Colegio Electoral. Fracasaron en los estados clave de Ohio y Florida, donde pensaban que iban a arrasar. Obama ganó las elecciones contundentemente.
La mayoría de los analistas coinciden en el cambio demográfico del país para explicar el triunfo relativamente holgado de Obama y el sonado fracaso republicanos. Los republicanos apostaron a la baja participación en las urnas de latinos, mujeres, afroamericanos y jóvenes. Cometieron el error garrafal de pensar que los votantes ya no apoyarían a Obama como en el 2008.
Más allá del nuevo rostro del votante, es significativo que los votantes minoritarios emitieron su voto no sólo en apoyo del mandatario, sino contra las ideas y las propuestas de los republicanos que respondían a una agenda ultra conservadora. La mayoría de los votantes rechazó el extremismo republicano en cuanto a inmigración, salud, gobierno, aborto, impuestos, entre otros temas fundamentales.
Romney intentó al final de recular tratando de adoptar posturas menos extremistas, pero fue demasiado tarde. Los republicanos pasaron cuatro años amenazando a los latinos, a los afroamericanos y a las mujeres con adoptar medidas que les impactarían personalmente. Ningún candidato puede ofender y amedrentar repetidamente a los votantes para después pretender que éstos voten a su favor.
Los votantes rechazaron las ideas republicanas de que los indocumentados se auto deporten y de que Arizona debería ser un modelo nacional para resolver el problema de la inmigración de indocumentados. También votaron a favor del derecho de la mujer al aborto y al uso de anticonceptivos. Y apoyaron legislación que permite el matrimonio gay.
No cabe duda que el país se ha ido transformando. Más les vale a los republicanos entenderlo. De otra manera, no volverán a la Casa Blanca en cuatro años.
