Villaraigosa promete acelerar paso en 2013
Su gobierno en la alcaldía concluye en seis meses, pero no bajará su ritmo
El alcalde Antonio Villaraigosa dice que estará bastante activo en sus últimos meses en la alcaldía. Crédito: J. Emilio Flores / La Opinión
Antonio Villaraigosa sonríe, estrecha manos y conversa sin parar en el estacionamiento del Sport Arena de Los Ángeles. Desde que tomó las riendas de esta ciudad, al alcalde nunca se le ha visto quieto. Jamás.
Así continuará, promete, hasta el último segundo de su gobierno, que concluye en seis meses, el 30 de junio de 2013.
No seguirá la tradición de aquellos gobernantes que bajan el ritmo al final del mandato.
“Yo estoy trabajando incluso más”, dice Villaraigosa en una entrevista con La Opinión. “Muchos hacen preparativos para salir de la oficina, yo estoy totalmente dedicado a mi trabajo”, afirmó.
El déficit municipal, la reelección del presidente Barack Obama, los viajes a la capital del país para acelerar proyectos de transporte, la huelga en el puerto, la gira por Sudamérica y ahora su campaña contra las armas de asalto, no le han dejado al alcalde tomar un respiro en el último tramo del año.
Y la agenda seguirá repleta de actividades en 2013. “Voy a trabajar tanto como prometí, sea transporte, seguridad pública, reforma educativa, medio ambiente o haciendo lo posible para crear los empleos que necesitamos”, expresó el alcalde en un evento después de Navidad.
“Voy a trabajar día y noche en la agenda que empezamos hace siete años”, señaló el funcionario.
Si bien no ha bajado la velocidad de su tren de trabajo, últimamente se le ha visto más en actividades de carácter nacional, sobresaliendo su participación como presidente de la Convención Demócrata, sus recorridos por el país apoyando a Obama y las constantes visitas a Washington D.C.
El que esto coincida con tener un pie afuera del Ayuntamiento, le ha valido críticas sobre que ya estaría buscando un puesto en la administración federal, antes de lanzar su sombrero al ruedo en la contienda por la gubernatura de California, un cargo que –al menos públicamente- ha perseguido desde 2010.
Esa posibilidad estará abierta hasta el año 2015, cuando termine el primer período de Jerry Brown.
Por el momento, sólo anticipa que su aspiración es tener menos ajetreo cuando entregue la estafeta. “Espero pasar más tiempo con mi familia cuando el trabajo sea menos, en los siguientes años”, dijo.
Funcionarios locales consultados por La Opinión dan una buena calificación al tramo que ya ha recorrido la gestión del alcalde y le recomiendan no aflojar la marcha en 2013. “Ha sido el alcalde más fuerte que la ciudad jamás ha tenido en el campo de la seguridad pública”, expresó el jefe del Sheriff del condado, Lee Baca, quien resaltó la disminución de la tasa de crímenes a niveles no vistos desde hace 40 años.
“Ha hecho un gran trabajo”, comentó la procuradora de distrito, Jackie Lacey.
Por su parte, el fiscal municipal Carmen Trutanich aplaudió que Villaraigosa también ha “enverdecido” al puerto y el aeropuerto. “Tenemos que darle crédito como un gran alcalde”, dijo el funcionario, quien cree que en lo que queda de su administración posiblemente siga construyendo su legado. “Lo veremos trabajando duro, de manera que sea recordado positivamente”, expresó.
Eric Garcetti, concejal angelino y candidato a la Alcaldía, cree que aún hay asignaturas pendientes.
“El enfoque para el 2013 debe estar en hacer que el Ayuntamiento ayude mejor a la gente a solucionar sus problemas, incluido una respuesta más rápida del departamento de bomberos, reparar más los baches y responder rápidamente a las quejas de cada vecindario”, comentó.
El 1 de julio, Villaraigosa heredará al siguiente alcalde la nómina más delgada de los últimos diez años, menos servicios locales, baches por doquier y profundos recortes fiscales, pero también bajos niveles delictivos, una Policía más diversa y menos problemática, un puerto menos contaminado, un sistema de transporte en pleno desarrollo, así como un aeropuerto en proceso de renovación.
Pero no quiere dejarle nota alguna a quien ocupe su lugar. “No tengo recomendaciones”, subraya.
De hecho, aún no ha externado su respaldo a quien considera el mejor candidato. No obstante, en los últimos eventos públicos ha sido acompañado en más ocasiones por la contralora Wendy Greuel, quien compite nariz con nariz contra Garcetti.
Por lo pronto, del único de quien prefiere hablar Villaraigosa es de él mismo. “Voy a trabajar hasta el último día, durante todo el tiempo que tenga este empleo”, recalcó.
