Tildan a Tamaulipas de “Estado fallido” y “narcoestado”
El empresario mexicano Alejandro Martí, fundador de la organización civil por la seguridad y contra el secuestro SOS, demandó mayor acción de las autoridades federales
Mexico.- Una balacera tras otra, avenidas bloqueadas, 75 inmigrantes secuestrados y liberados, un reportero que se suicida tras su rapto, familias completas desaparecidas, jóvenes “levantados” a plena luz del día, mientras caminan por las calles, en fiestas privadas, sentados en las banquetas.
El parte policíaco de las últimas horas en el fronterizo estado norteño de Tamaulipas volvió la atención de activistas y defensores de derechos humanos.
“Tamaulipas sigue siendo un Estado fallido”, alertó el empresario Alejandro Martí, fundador de la organización civil por la seguridad y contra el secuestro SOS, una de las más críticas del país.
El activista contabilizó en los últimos 15 meses 317 tiroteos en las distintas ciudades de la entidad dominada por los cárteles del Golfo y los Zetas que controlan la información local a punta de pistola contra la prensa, las redes sociales y cualquier tipo de comunicación que “caliente” la plaza.
El 26 de marzo se mató de un tiro en la cabeza el reportero Gilberto Moreno, director de la revista crítica Atorón Tamaulipeco, después de ser liberado por sus secuestradores, un mes atrás.
El periodista Carlos Loret de Mola, conductor de la cadena de televisión Televisa, solicitó públicamente, a través de un artículo de opinión, la creación de un puesto similar al “zar antidrogas” de Michoacán para mejorar al “narcoestado” de Tamaulipas, “el peor de todos”.
Un reporte de la agencia de información anónima “Valor por Tamaulipas” –por cuyas cabezas el crimen organizado ofrece recompensas- detalló que sólo en el mes de marzo los delincuentes desaparecieron a 16 personas que caminaban en las calles de Ciudad Victoria, Nuevo Laredo y Reynosa.
En esta última, un grupo de hombres armados bloqueó el miércoles las calles con 20 vehículos de carga y atacó a la Policía Federal tras la captura de uno de los lideres de plaza. El saldo fue de seis muertos. Horas antes, el Ejército liberó a 75 centroamericanos retenidos a la fuerza por secuestradores y contabilizó 130 toneladas de marihuana incautada.