FBI colabora en caso Eliza
Policía no descarta ninguna hipótesis y siguen buscando pistas
Lugar donde vivía la pequeña Eliza. Crédito: Jorge Morales
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) está colaborando en el misterioso caso de Eliza Delacruz, confirmó Robert Luna, jefe de la Policía de Long Beach (LBPD).
Eliza Delacruz, de tres semanas de nacida, fue encontrada muerta el domingo en un contenedor de basura cerca de la frontera con Tijuana luego de que un día antes su mamá, papá y tío sobrevivieran a un ataque a balazos en Long Beach.
Los detectives han declarado que la niña fue raptada luego de que un hombre, latino o afroamericano, disparó contra las tres personas, cuyos nombres no han sido dados a conocer de manera oficial.
Sin ofrecer muchos datos sobre el caso, el jefe Luna insistió este lunes en solicitar la colaboración del público para que obtener pistas, ya que no hay avance en la investigación y ni siquiera los sobrevivientes han colaborado.
“Tomar la preciada vida de una bebé de su casa y tirarla en un contenedor como un pedazo de basura es algo que sólo puede hacer una persona sin corazón”, dijo el jefe policíaco. “Necesitamos detener a ese cobarde”.
Debido a que el rapto de la bebé ocurrió alrededor de las 5:50 p.m. del sábado, se cree que alguien escuchó o vio algo.
“Aunque crea que es información irrelevante o si quiere decirlo de manera anónima, llame por teléfono”, pidió Luna a posibles testigos.
Al mencionar que no han descartado ninguna hipótesis, como que el atacante se encuentre en México o que grupos criminales estén involucrados, Luna aseguró que el FBI y otras agencias federales ya están colaborando en el caso.
Un vecino de la casa donde ocurrió el tiroteo del sábado, ubicada en el 34 de West 51st Street, en Long Beach, dijo que ese día los comentarios de la gente relacionaron el ataque y el rapto de la bebé a una disputa familiar.
La Opinión publicó también la declaración de un familiar de los heridos que señala que “un mexicano” ya había amenazado con llevarse a la niña a México.
Un detective mencionó que el padre, con el argumento de que teme represalias, no ha ofrecido información relevante que los lleve a suponer un móvil del ataque y ni siquiera la descripción del sospechoso para realizar un retrato hablado.
El padre sólo fue identificado como trabajador de una veterinaria, de 23 años de edad, y que Eliza era su única hija.
Las autoridades tampoco han podido aclarar si el atacante conocía a sus víctimas. Residentes del área describieron a la familia como alegre y calmada que solía hacer carnes asadas en el amplio patio de la casa, donde se observan varios juguetes de niños.
La Oficina del Forense de San Diego indicó que no podían revelar ninguna información sobre la causa de la muerte de Eliza ya que el caso está bajo restricción judicial.
Teléfonos para pistas:
800-222-8477
562-570-7244
