Escuelas preescolares en la Bahía aspiran a elevar calidad con el ‘Common Core’

El establecimeinto de los Estándares Estatales de Núcleo Común ayudará a elevar el nivel de la educación preescolar pública, según testimonios

Common Core

Crédito: Marcela Gray | La Opinión de la Bahía

Hoy en día, los estudiantes en Estados Unidos deben prepararse para un mundo en donde universidades y empresas a nivel nacional e internacional demandan más conocimientos que en años anteriores.

Para asegurar que todos los estudiantes tengan ventajas competitivas y estén preparados para la escuela secundaria, se crearon en 2010 los Estándares Estatales de Núcleo Común (Common Core Standards), que son una guía para que cada estudiante se desarrolle en áreas como las matemáticas e inglés desde el kínder hasta el 12° grado.

Los estándares fueron escritos por expertos y profesores alrededor del país. El núcleo común se centra en desarrollar el pensamiento crítico, resolver problemas y conocimientos analíticos que los estudiantes necesitarán para ser exitosos. Y aunque no están exentos de controversia, son un referente educativo nacional.

Todo empieza a los 4 años de edad

Christina López es maestra de preescolar en una escuela privada y está finalizando su maestría en Ciencias de la Educación en Cal State East Bay. Ella escribió su tesis sobre las diferencias entre el curriculum de la escuela privada donde imparte lecciones y la escuela pública Griffen Nursery, en Berkeley.

“Utilizamos los kimochis [muñequitos que expresan estados de ánimo] como herramienta para que los niños expresen y controlen sus emociones. Este sistema basado en el aprendizaje social-emocional ha sido un gran éxito en nuestra escuela”, expresó López.

“Sin embargo cuando hice mi tesis en la escuela Griffen Nursery pude comprobar que los niños tenían sus rabietas, pelean y muerden porque quieren expresar algo pero no lo hacen correctamente. Y no es por falta de maestras porque en una clase de 18 niños habían cuatro profesoras”, aclaró.

“Los niños de preescolar en escuela pública no tienen rutina, calendario o disciplina: son libres de hacer lo que quieran, no hacen trabajo en la mesa. Solamente tienen 10 minutos para leer historias y cantar una canción, esto los convierte, básicamente, en guarderías de 8 am a 5 pm”, dijo.

“Es preocupante porque estos niños no están preparados para el kínder, en donde deben conocer el abecedario, sonidos y fonética, colores, formas, palabras en mayúscula y minúscula, conocimientos motores, escribir su nombre, dirección, teléfono, fecha de nacimiento, los nombres de sus padres, patrones de matemática e introducción al dinero, entre otros”, manifestó.

Connie Robles vivió esta experiencia con su hija Alexa. “Tuve que cambiar a mi hija a una escuela privada porque todos los días venía con un golpe diferente. Yo me ofrecí de voluntaria y pude comprobar que los niños no hacen actividades en la mesa y no les ponen disciplina, simplemente ya no soportamos más esta situación y decidimos cambiarla de escuela”, recordó.

En general, los niños preescolares en las escuelas públicas enfrentan una serie de problemas, especialmente disciplinarios.
En general, los niños preescolares en las escuelas públicas enfrentan una serie de problemas, especialmente disciplinarios.

Los estándares en el kínder

Katherine Bartlett Herrera es maestra de kínder desde hace 16 años en la escuela Goerge Mayne del Distrito Escolar de Santa Clara.

Según Bartlett, en una clase pueden tener hasta 30 estudiantes y solo una maestra, lo que dificulta una atención individualizada de cada alumno.

“Creo que sí vamos a poder cumplir con los estándares porque enseñamos todo el día, si fuera solamente medio día no podríamos abarcarlos”, dijo.

“Este año empezamos a implementarlos en la escuela, sin embargo todavía no se reflejan en las calificaciones, porque aún nos falta el material necesario para cumplir con esta nueva demanda didáctica”, aseguró.

“Como los estándares no se desarrollaron para preescolar, los niños no vienen preparados, mucho menos los que no cursan este grado”, agregó.

“En el caso de los niños hispanos que no hablan inglés, el curriculum en general se les dificulta más”, indicó.

Con estos estándares ya no habrá problema cuando un estudiante se mueva de un estado al otro, ya que los profesores sabrán exactamente en qué nivel está el estudiante.

Es importante recalcar que los estándares establecen lo que los estudiantes deben aprender, pero no pretenden dictar lo que los maestros deben enseñar por lo que  queda a criterio de los docentes.

Se espera que próximamente se desarrollen los estándares en las áreas de ciencias, lenguajes y artes.

En práctica 

Cuarenta y tres estados, el distrito de Columbia, cuatro territorios y el Departamento de Defensa por las Actividades de Educación (DoDEA por sus siglas en inglés) han adoptado voluntariamente este programa. La implementación del Núcleo en Común en las escuelas de California se realiza desde el año pasado.

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