El programa de credencial para maestros promueve burocracia y más deudas

California se dirige a una era de escasez de maestros, y cientos de miles de estudiantes de distritos escolares públicos se verán afectados

Se necesitan más maestros sobre todo en ciencias.

Se necesitan más maestros sobre todo en ciencias. Crédito: Archivo/La Opinión

La legislación educativa está elaborada por intereses especiales y cabilderos profesionales que se enfocan en crear programas para endeudar a los estudiantes y hacer más cara la toma de exámenes de quienes quieren convertirse en maestros.

Son los políticos de carrera, no los educadores, quienes escriben y aplican las leyes de educación pública. Muchos políticos obtienen contribuciones de los intereses especiales para influir en el tipo de leyes de educación que se escriben e implementan. Como decía el excandidato presidencial Bernie Sanders “el sistema está corrupto.”

California se dirige a una era de escasez de maestros, y cientos de miles de estudiantes de distritos escolares públicos se verán afectados.

¿Cómo se volvieron los programas de credenciales para maestros tan caros y burocráticos?

En 1998, la Legislatura de California aprobó la ley SB2042, creada por la senadora estatal Deirdre “Dede” Alpert y la asambleísta Kerry Mazzoni. La ley, que fue ratificada aquel mismo año, actualizaba los requisitos de preparación de maestros y las regulaciones de la Comisión de California de Credenciales para Maestros por primera vez desde la Ley Ryan de 1970.

Algunas de las consecuencias de esta legislación son los cobros adicionales que se generaron para tomar clases en las universidades, y los múltiples cobros para tomar exámenes de docencia. En la actualidad, obtener una credencial educativa cuesta entre $30,000 y $50,000. Y desde la implementación de esta ley toma dos años adicionales obtener la credencial de maestro a tiempo completo. Es simplemente demasiado caro y burocrático.

Muchos profesionales quieren cambiar de carrera y convertirse en maestros de escuelas públicas. Pero una vez que se enteran de las exigencias del programa de credenciales, de la deuda adicional que generan los préstamos estudiantiles, las molestias de volver a la universidad y la falta de empleos de enseñanza bien remunerados, deciden no hacerlo.

Irónicamente, aunque los maestros pasan por tanta preparación – muchos nuevos maestros son tratados como trabajadores migrantes. Trabajan intensamente por un salario magro. Más estrés se agrega con los administradores que siempre están monitoreando y criticando a los maestros.

Podemos comenzar a hacer una diferencia positiva cambiando el programa de credenciales para maestros para que sea de un año de teoría a través de clases académicas en el salón de clases.

La enseñanza para docentes se lleva a cabo en el aula donde éstos ejercen su trabajo. Quienes están preparándose para ser maestros deben percibir pago por una pasantía de un año, para luego poder ser contratados a tiempo completo. El sistema no debe aprovecharse de la mano de obra gratis al requerir tres meses de enseñanza a tiempo completo por parte de los futuros maestros sin paga.

Los futuros maestros no deben tener miedo. Nuevamente, los programas de preparación para maestros deben ser menos burocráticos y caros. Deben ser mas enfocados en la práctica de enseñanza en las clases. Los maestros deben sentirse felices haciendo lo que les encanta, que es simplemente enseñar.


Randy Jurado Ertll es autor de la novela Las Vida y los Tiempos del Cipitio.

Su sitio de web es WWW.RANDYJURADOERTLL.COM

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