A la hora de estacionar el carro, esta latina se ocupa
La salvadoreña Patty Rodríguez comenzó en 2011 un negocio de estacionamiento en San Francisco que ahora está ampliando
A Patty Rodríguez no le gusta quedarse quieta. En 2011 tenía dos empleos, estaba en la Universidad y tuvo a su hijo. Ese mismo año se presentó una oportunidad que ella vio como una manera de ayudar a personas que se iban a quedar sin trabajo en ese momento. Y aceptó el reto de convertirse en empresaria.
Hoy, ocho años más tarde, dirige SF Parking, una empresa de gestión de estacionamientos en San Francisco.
Esta salvadoreña de 39 años llegó a esta ciudad californiana cuando tenía tres, acompañada de su abuela, su tía y su hermano para reunirse con sus padres. “Mi madre era cuidadosa con el dinero”, explica para describir la situación económica de su familia. “Tenía donde vivir, comida y ropa pero mis amigas siempre tenían más que yo”.
Cuando era pequeña y pensaba en qué ser de mayor pensó en ser policía, porque quería tener un trabajo con el que ayudar a los demás. No fue así. Estudió administración pública porque le abría un campo de trabajo muy amplio y empezó a trabajar en el sector de la salud, al principio como recepcionista.
Aquel año en el que su vida dio el giro hacia el mundo de la empresa, supo por uno de sus amigos que una empresa de estacionamiento iba a cerrarse y dejar sin empleo a 15 personas. Decidió hacer lo que pudo por evitarlo. “Tomé el riesgo”, explica. Sacó su dinero de la jubilación y pidió ayuda económica a su madre, se informó sobre el negocio y acudió a la oficina de Small Business de la ciudad para obtener una licencia, registrarse y montar una empresa de estacionamientos que ofrecía un nuevo contrato a estos conductores.
Era un servicio de vallet parking y SF Parking,LLC empezaba su andadura con 15 personas que luego serían 30. Ahora la empresa no hace este tipo de servicio de estacionamiento en restaurantes “porque requiere mucho para que se mantenga y resulta difícil que de beneficios”. En este momento la empresa opera estacionamientos y hace servicios de asistencia (concierge).
Rodríguez dice que en este negocio en el que hay pocas mujeres tuvo que preguntar a muchos conocidos y aprender mientras iba avanzando. Cree que nunca hay que tener miedo de preguntar y admitir que hay cosas que no se saben. “Yo nunca te tenido miedo de hacer preguntas”.
Su empresa está certificada como MWBE (mujeres y minorías) en San Francisco lo que le da acceso a una porción reservada de contratos de la ciudad y le abrió las puertas a un contrato para operar aparcamientos en el aeropuerto de esta ciudad. Para su empresa y para ella, entrar en este programa fue abrir una puerta a la mentoría y el motivo de que haya cambiado la forma en la que empezó a hacer el negocio al principio para pasar del vallet a operar estacionamientos, un negocio en el que la empresa ha encontrado los beneficios.
Uno de los escollos con los que se tropezó Rodríguez fue la financiación. En 2012 necesitaba fondos y los bancos se los negaron
No es algo nuevo, la banca no suele conceder fondos a empresarios con poco historial y sin activos con los que avalar. “No me tomaron en serio”, dice.
Pero esta salvadoreña fue dirigida por la Oficina de Pequeños Negocios a Working Solutions, una organización certificada por la Institución Financiera de Desarrollo Comunitario (CDFI en sus siglas en inglés) y que está especializada en ayudar con el capital a empresas nuevas.
“Tuve que presentar mi proyecto y me dieron la oportunidad”, explica, “en aproximadamente un mes tenía lo que necesitaba”. Rodríguez dice que en esta organización le prestaron atención y el hecho de ser latina, mujer y en un sector en el que no hay muchas no jugó en su contra.
La segunda vez que fue a Working solutions a por un préstamo para ampliar su compañía la redirigieron a Entrepreneurs of Color Fund, un programa apoyado por JPMorgan Chase, que se estrenó en Detroit para proporcionar capital y asistencia técnica a empresarios y creadores de empleo. Este fondo se ha ampliado a zonas de Chicago y San Francisco. Rodríguez consiguió un segundo préstamo con el que ampliar su empresa.
Esa empresaria se ha certificado como MWBE en el estado y a nivel federal para expandir las oportunidades y quisiera comprar su propio garaje en San Francisco. “Eso no va a ocurrir pronto porque la propiedad es muy cara en esta ciudad”.
Segunda oportunidad
Patty Rodríguez dice que ofrece empleo a personas que tienen problemas para encontrar uno. Se refiere en especial a a personas que han pasado por prisión y tienen muy complicado encontrar un trabajo.
“Es importante ofrecer una segunda oportunidad a personas que tienen problemas para salir del todo de la cárcel”, explica.