VIDEO: “Pescaba” gatos en Pennsylvania. Ahora está detenido por crueldad animal

En su comparecencia el acusado dijo (llorando) que lo hacía para alimentar a los animales y no para lastimarlos. Pero algo no cuadra en sus declaraciones

Un refugio de animales de la zona consiguó curar a uno de los gatos afectados..

Un refugio de animales de la zona consiguó curar a uno de los gatos afectados.. Crédito: Whiskers / Fotograma video

Kenny Rowles, de 27 años, está acusado por poner ganchos para pescar en la comida que él mismo le ofrecía a gatos callejeros. Una vecina y las autoridades advirtieron heridas graves en las bocas de algunos de los felinos y denunciaron la situación. El hombre, residente de Plymouth (Pennsylvania), está ahora arrestado y se enfrenta a cargos de tortura animal y lesiones corporales graves en gatos.

Fue la Sociedad para la prevención de la crueldad animal la que dio la voz de alarma sobre un gato que habían encontrado en abril con uno de esos ganchos clavados en la boca. El felino callejero, hallado en una casa abandonada de Plymouth, sobrevivió tras ser atendido aunque le quedó una herida visible en la boca. Poco más tarde, un refugio de animales alertó sobre dos felinos que tenían cuerda de pescar saliendo de la boca.

Una llamada a la policía sobre un caso específico puso a Rowles en el foco. Cuando las autoridades lo interrogaron, el acusado admitió que había puesto carne en un gancho con una cuerda de pescar en la parte trasera de su casa. El hombre también reconoció que con ello pretendía que se acercaran los gatos callejeros, pero aseguró que su intención no era dañar a los animales. Entonces, ¿por qué le ponía esos peligrosos ganchos en la comida?

Dawn Mandygral, una vecina de la zona, dijo a una televisora local que al primer gato lo habían visto en una casa abandonada, donde los antiguos propietarios habían dejado muchos más felinos cuando desalojaron la casa.

La encargada de la oficina del condado de Luzerne dijo que el objetivo del hombre era “preocupante”: “una cosa es ser negligente, pero hacer daño de manera intencionada es ilegal”. La oficina declaró haber recibido una llamada del refugio para animales Whiskers, en la que aseguraron que Rowles presumía con sus vecinos de sus “hazañas”.

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