Estos son los síntomas y causas del Síndrome de las Piernas Inquietas

El Síndrome de Piernas Inquietas es una enfermedad cuya causa se desconoce. Aunque algunos sospechan que está vinculada con la psicología, lo cierto es no se ha determinado su origen. Sin embargo, se deduce cuáles son sus síntomas característicos, tal como verás a continuación.

Causas del Síndrome de las Piernas Inquietas

Aunque los investigadores sospechan que el Síndrome de las Piernas Inquietas se debe a un desequilibrio de la dopamina, una sustancia química cerebral que controla los movimientos musculares en el cuerpo, aún deben realizarse varios estudios que confirmen esta hipótesis, tal como indica Mayo Clinic en su web oficial.

Hay ocasiones en que este síndrome es hereditario, especialmente en casos donde se manifiesta antes de los 40 años. Científicos han detectado cromosomas donde posiblemente estén presentes los genes que originen este síndrome.

Las mujeres embarazadas pueden contraer por primera vez esta enfermedad, especialmente en el último trimestre de gestación. Si la han contraído previamente, los síntomas y signos suelen empeorar. No obstante, la sintomatología desaparece posterior al parto.

Síntomas

Como su nombre sugiere, el síntoma principal del Síndrome de las Piernas Inquietas es la poderosa necesidad de mover las piernas. Es común que los síntomas empeoren en el período nocturno, específicamente mientras dormimos.

Las sensaciones asociadas con el síndrome ocurren por inmovilidad o poco movimiento. Pueden empezar por estar acostado o estar sentado por una prolongada cantidad de tiempo. La sintomatología de la enfermedad desaparece o disminuye con el movimiento.

Las personas definen los síntomas del síndrome de las piernas inquietas como sensaciones desagradables en pies y piernas, sensaciones que aparecen en ambos lados del cuerpo. Ellas se describen generalmente como:

• Cosquilleo
• Hormigueo
• Tirones
• Dolor
• Picazón
• Electricidad

Personas con el Síndrome de Piernas Inquietas nunca visitarán al médico por considerar que no debe ser tomada en serio. Sin embargo, esta enfermedad puede perjudicar los hábitos de sueño, trabajo, y otros ámbitos de tu vida.

Visita a un especialista de manera que recibas una mejor orientación sobre esta enfermedad y los posibles alcances que tenga sobre tu salud.