Rechazan ampliación del Centro de Detención de Adelanto

El grupo GEO, administrador del lugar, pretende meter cientos de nuevas camas

Quieren diversificar la economía de ciudades que dependen de las cárceles.(Getty Images)

Quieren diversificar la economía de ciudades que dependen de las cárceles.(Getty Images) Crédito: John Moore | Getty Images

A pocas horas de que el Concejo de Adelanto vote por la ampliación del centro de detención del Servicio de Migración y Aduanas (ICE) de esa ciudad, inmigrantes que estuvieron bajo custodia en esa prisión se manifestaron en contra debido a las condiciones inhumanas bajo las que operan.

El grupo GEO administrador del Centro de Procesamiento del Servicio de Migración y Aduanas (ICE) en Adelanto, pretende crear espacio para incluir 750 camas más. En la actualidad tienen alrededor de 1,900 inmigrantes detenidos.

“El gobierno le paga a GEO, $200 por día por cada inmigrante detenido”, dijo Kimberly Galindo de la organización Inland Coalition for Immigrant Justice quien agregó que la comunidad no quiere la expansión del centro de detención de inmigrantes más grande del oeste de Estados Unidos.

A sabiendas de que iba a entrar en vigor la ley AB 32 en 2019 que prohíbe nuevos contratos con compañías privadas de cárceles, el grupo GEO se anticipó a la fecha para presionar a las autoridades locales y avanzar en su proyecto de ampliación de sus instalaciones en Adelanto.

Geo es propietaria de siete de las diez cárceles privadas en California. (Manuel Ocaño/La Opinión)

Armando Carmona, vocero de la Coalición por el Cierre de Adelanto, dijo que se tienen preparadas varias demandas para en caso de que se apruebe la ampliación.

La Coalición por el Cierre de Adelanto convocó a una reunión virtual de prensa para escuchar los testimonios de inmigrantes que estuvieron en esa prisión manejada por el grupo GEO.

“En Adelanto se mantiene a las personas en condiciones inhumanas. Enfermedades venéreas simples pueden ser mortales. Ahora con el coronavirus, a los detenidos se les rocían químicos que son totalmente dañinos, tóxicos y cancerígenos; y los inhalan porque no hay forma de que escape el aire en esos huevos que son las celdas de Adelanto”, dijo Erwin, un ex detenido de Adelanto.

En tanto Janett, cuyo esposo estuvo recluido en Adelanto, pidió al Concejo de Adelanto que no acceda a la expansión. 

“Si GEO amplía Adelanto, va a ver más familias que van a sufrir. Somos trabajadores, venimos aquí a ayudar a que este país sea grande y próspero. Pagamos impuestos. Somos honrados. Solo queremos el mejor bienestar para nuestra familia”.

Luis, otro inmigrante que estuvo en Adelanto se quejó del trato que les dan los oficiales. “Nos tratan peor que animales porque a un animal se le pone agua para beber y se le alimenta. A nosotros nos miran de menos. Por cualquier cosa que hagas te castigan y te meten al hoyo. Hay gente que la han metido ahí hasta por un año. Muchos se están volviendo locos por el maltrato y el encierro”.

En su caso denunció que un oficial de Adelanto tocó sus partes íntimas dos veces. “Eso es acoso y abuso sexual”.

Consideró que deberían cerrar todos los centros de detención de inmigrantes. “Son un negocio. Para migración y la compañía somos una ‘monedita de oro’. Sin nosotros no existirían. No estoy de acuerdo con que lo hagan más grande”.

Persisten condiciones inhumanas en Adelanto / archivo.

Ursula comentó que cuando su esposo estuvo detenido en Adelanto, sufrió sobre todo por las malas condiciones médicas. “Se imaginan cómo los están tratando con COVID-19”.

Por lo que urgió a las autoridades a tratar a los inmigrantes detenidos como les gustaría que a ellos los trataran.

“Estas voces son un poco de ejemplo de la negligencia médica y otras represalias extremas que los inmigrantes experimentan dentro de la prisión de Adelanto“, dijo Shanon Camacho, coordinadora de la Red de Respuesta Rápida de Los Ángeles y quien trabaja para la Coalición por los Derechos de los Inmigrantes (CHIRLA).

Añadió que GEO y ICE han hecho todo lo posible para mantener las prisiones privadas en California, lo que ha incluido usar su influencia sobre el Concejo de Adelanto y sus residentes.

Ana quien pasó dos años en Adelanto, dijo que le tocó ser rociada por los químicos que esparcen en esa prisión para prevenir COVID-19. “Yo estaba dentro de la celda y empecé a sentir mi garganta irritada. No soy una persona sensible para nada, y aún así era difícil para mi respirar”.

Hizo ver que no existen protocolos para proteger a la gente del coronavirus de una unidad a otra.

Por eso se siente extremadamente triste al saber que quieren agregar 750 camas más.  “Esto significa 750 personas fuera de nuestras comunidades, o de gente que viene de otros países porque ha sufrido persecución”.

Añadió que por los $200 que el gobierno paga a GEO por noche, se pondría rentar una noche en un hotel bonito.

La meta de la Coalición por el Cierre de Adelanto, es la clausura de esta prisión para inmigrantes, y la liberación de todos los detenidos.

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