Angelinos arropan a Dodgers en Texas

El domingo pasado cuando faltaba un “out” para que los Dodgers clasificaran a su tercera Serie Mundial en los últimos cuatro años, Eddie Quillares Jr., decidió que la hazaña de los azules de remontar la serie ante Atlanta merecía hacer el viaje hasta Texas para ver a los angelinos diputar el título frente a los Rays de Tampa Bay.

“Cuando hace dos semanas anunciaron que iban a tener fanáticos, empezamos a planear, pero nos esperamos hasta el final del partido 7… Ya el domingo en la noche, cuando faltaba un ‘out’ compré los boletos y todo”, cuenta Eddie, que junto a sus amigos Pedro Adame, TimMorley y Danny Ruvalcaba viajaron hasta Texas.

Allá se encontraron con otro grupo que viajó desde Los Ángeles para asistir a los primeros dos juegos de la Serie Mundial en el GlobeLife Field de Arlington.

“Nos fuimos con unos buenos amigos, con los que siempre vamos a los partidos desde hace unos cinco años. Fuimos seis en total y allá nos juntamos con otros amigos que viven en Dallas”, agrega el hombre de 38 años residente de Santa Ana.

Este grupo de angelinos se llevó una grata sorpresa al ver que cientos de aficionados de Los Ángeles habían emprendido el viaje para apoyar a los dirigidos por Dave Roberts.

“La experiencia fue estupenda, solamente 10,000 personas van al juego, porque los otros 1,000 son para jugadores y sus familias… Todo el aeropuerto de Dallas está lleno de aficionados de los Dodgers y luego, lo más importante es que llegas al estadio y [hay] puro azul de los Dodgers”, revela Eddie.

El hombre mexicoamericano asegura que por cada cuatro aficionados, tres eran de los Dodgers lo que hace que los hombres de azul se sientan como en casa y arropados por su afición.

Sobre su amor por el equipo, Eddie recuerda que su afición surgió luego de ver —junto a su padre Edmundo— la Serie Mundial de 1988, última vez que los angelinos ganaron un anillo de campeón y cuando en sus filas estaba el legendario pitcher mexicano, Fernando “El Toro” Valenzuela. Desde entonces ha sido fiel seguidor de la escuadra.

“Para mí los Dodgers son recuerdos de mi infancia, no importa sigan o pierden vamos a ser fans de los Dodgers de por vida, además Fernando Valenzuela ha sido parte de nuestra cultura acá en Los Ángeles”.

Sin temor a la pandemia

Eddie reconoce que, debido a la situación que se vive por la pandemia por el COVID-19, viajaron con reservas y muchas precauciones; no obstante, tenían certeza de que las Ligas Mayores habían tomado todas las medidas para no poner en riesgo la salud de los aficionados.

“Sabíamos que era peligroso viajar por la pandemia, pero sabíamos que el aeropuerto y sobre todo en el estadio no nos iban a poner en peligro. Si ellos dieron la luz verde sabíamos que iban a hacer todo lo posible para cuidar nuestra salud”.

Este aficionado asegura que las medidas de precaución que se están tomando permiten a los asistentes al estadio disfrutar del juego sin preocupaciones.

“La verdad han hecho un trabajo estupendo. Yo me sentía más seguro en el estadio que en cualquier lugar que he visitado en los últimos seis meses”, afirma Eddie.

“Había un trabajador en cada sección, los boletos solo se vendieron en paquetes de cuatro para y cuidar nuestra salud y no estar cerca de otras personas”.

Efectivamente, los aficionados son acomodados en los extremos de las filas de asientos dejando toda la parte del centro libre entre cada grupo de cuatro personas.

“También si tenías tus mascarillas abajo, te pedían que te la pusieras. Toda la gente usa cubrebocas, toda”, agregó.

‘La tercera es la vencida’

Mientras Eddie ya está de regreso en California y haciendo planes para ver el resto de juegos en casa, Alfredo Mendoza se alista para emprender su viaje a Texas y disfrutar hoy [domingo] del quinto juego de la Serie Mundial entre Dodgers y Rays.

Este joven de 21 años viaja con una sola ilusión: ver a su equipo ganar el título.

“La razón por la que voy a pesar de la pandemia es porque [sería] un sueño ver a mi equipo ganar una Serie Mundial, sería un sueño cumplido… Los mismos jugadores dicen que hay algo especial este año y de veras creo que este va a ser el año de cumplir ese sueño”, dice Alfredo, que disfrutará de esta aventura junto a su padre, con quien comparte su nombre.

“Desde chiquito andaba con él, íbamos a todos juegos de Chivas y de los Dodgers. Somos muy fanáticos de los deportes, ver a mi equipo ganar una Serie Mundial al lado de mi papá sería perfecto”, confiesa el joven.