Urgen al presidente de México a resolver la incierta situación de trabajadores de consulados

A menos de 24 horas de denunciar públicamente las pobres condiciones bajo las que alrededor de 1,700 trabajadores clasificados como prestadores de servicios independientes, laboran en los consulados de México en Estados Unidos, comenzaron los despidos.

“A pesar de que el Canciller Marcelo Ebrard reconoció las injusticias laborales a las que nos encontramos sometidos los empleados consulares de México en EE.UU, y a días de que termine el año, cuando muchos de nosotros nos encontramos de vacaciones, o en casa por situación de COVID- 19, en algunos consulados iniciaron las notificaciones de despido de empleados”,  dio a conocer el Comité de Empleados Locales de los Consulados a través de una carta dirigida al presidente Andrés Manuel López Obrador.

Explicaron que las bajas se han justificado por diversos motivos, que van desde el vencimiento de la visa tipo A-2 dentro de los próximos tres meses, hasta el clásico pretexto de recorte presupuestario, o simplemente por la facultad de poder que tienen los cónsules generales.

“Es evidente que no hay un criterio general y equitativo; y hay un discurso contradictorio de proporciones y circunstancias nunca antes vistas”.

Lamentablemente, dijeron, han constatado que aún existen prácticas autoritarias y al margen de la ley que la 4T no puede o no quiere erradicar.

“Es del dominio público que algunas de las representaciones, son dirigidas por funcionarios egocéntricos, controladores, enfermos de poder y soberbia que faltan el respeto a su país; y a nosotros los que alzamos la voz para eliminar la corrupción, nos callan despidiéndonos”.

Hicieron hincapié en que los empleados consulares, también son trabajadores migrantes; pero a pesar de que su labor es velar por los intereses de sus compatriotas en el exterior, están desprotegidos laboralmente por el mismo gobierno.

En 2015, los empleados consulares iniciaron un movimiento por sus derechos laborales; y a cambio, recibieron un ultimátum dirigido a los portadores de visa A-2, el cual llega a su término el próximo 23 de agosto. 

“Compañeros con más de 10 y hasta 20 años de trabajo continuo han sido dados de baja, sin la más mínima consideración; y ahora, en la etapa más crítica de la pandemia en México, los despiden”.

Han sido 5 años, 2 de la administración de la 4T, en los que el gobierno mexicano no se pronunció sobre la regulación de los derechos laborales, dijeron.

En la carta, pidieron la atención inmediata del canciller Marcelo Ebrard y del presidente Andrés Manuel López Obrador para sus compañeros que están siendo despedidos de manera arbitraria y autoritaria.

“Muchos de nosotros no tenemos un lugar al que regresar por la falta de patrimonio, ya que se nos ha privado de la seguridad social. En estos momentos tan difíciles de pandemia, somos el único soporte para nuestras familias en México”.

Es irónico, expusieron, que su propio país los deporte y los arroje a ser parte de las cifras de desempleo, sin ningún tipo de prestación social, después de años de servicio.

“Pedimos al gobierno de la 4T, la justicia que prometió hace tres años, confiamos en ella y la apoyamos. Ahora queremos resultados”.

Dulce Flores, quien desde hace 13 años trabaja para el Consulado de México en Los Ángeles, con una visa A-2, que no le otorga ningún beneficio laboral salvo cobertura de salud que no incluye a su cónyuge, dijo que el problema comenzó durante la Administración Obama y la Administración de Peña Nieto.

“Entonces, se nos dio a conocer que quienes trabajamos con una visa A-2, tendríamos que regresar a México, porque la visa ya no se nos renovaría después de 5 años, los cuales se vencen en agosto del año próximo”, precisó.

Cabe decir que los aproximadamente 1,700 trabajadores de los consulados de México en EE.UU. que están con una visa A-2, se les solía renovar su contrato cada año.

“Lo que sucedió después de 2005 cuando se dio a conocer que ya no nos renovarían las visas, es que los contratos son cada vez por menos tiempo de 3 y 6 meses; y de esa manera, nos tienen a todos en un constante suspenso laboral”.

Además, el único beneficio laboral que reciben es la cobertura médica en EE.UU. que no incluye a los cónyuges ni a ningún otro miembro de la familia como los hijos. “En el pasado, la visa incluía hasta un permiso de trabajo para los cónyuges, pero eso se eliminó”.

Tampoco tienen derecho a jubilación ni en México ni en Estados Unidos. “Nos califican como prestadores de servicios independientes, pero nos tratan como empleados porque nos hacen checar tarjeta para marcar el horario de entrada y salida”.

Vale decir que la clasificación como prestadores de servicios independientes fue creada por el ex secretario Jorge Castañeda.

Los sueldos para quienes laboran bajo la visa A-2 son en promedio de $2,500 dólares por mes. “Yo gano  $2,275 cada mes”.  Los trabajadores bajo la visa A-2 reportan que pagan un promedio de $1,800 por el alquiler de un departamento normal, más $1,000 en servicios.

La instrucción dada por el gobierno de Peña Nieta es que los trabajadores con visa A-2 fueran reemplazados por trabajadores que sean residentes o ciudadanos estadounidenses. “Y si han estado contratando. El problema es que no duran porque los sueldos son muy bajos”, explicó Dulce.

Y reveló que en el consulado de México en Los Ángeles ya se han presentado 10 despidos de personal con visas A-2, pero tienen otros en Chicago y San Antonio. Es gente que sus visas se terminan en los próximos tres meses.

“La verdad es que tenemos mucho miedo. Lo único que queremos es ser reconocidos como lo que somos, empleados de la Secretaría de Relaciones Exteriores”.

El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, reconoció durante la conferencia de Las Mañaneras, que efectivamente, la situación de los trabajadores con visa A-2 era una preocupación.

“Estamos en una negociación respecto al tema de las visas. Se le planteó al Departamento de Estado una modificación, y yo estimo que a fines del mes de febrero, podremos tener una respuesta de la nueva administración; y que el nuevo estatus que logremos, nos permitirá también ajustar su situación laboral que es muy incierta e injusta”.

Una vez que se consiga esa respuesta, podremos cambiar su estatus para que tengan seguridad laboral como es su derecho. “El 42% del personal de toda la cancillería está en esa situación”.