Regresan las ceremonias de graduación a Cal State LA

Cuando el artista y organizador José Quetzal Flores, les dijo a los graduados de Cal State Los Ángeles, que debían agradecer a sus padres y abuelos que cruzaron la frontera para que ellos pudieran tener una mejor vida, Laura Hernández se emocionó tanto, que estuvo a punto de llorar.

“Todo el trabajo logrado se lo debo a mis padres que vinieron de México. Mi papá Francisco Hernández trabaja en una bodega; y mi mamá, María en la limpieza de un hospital”, dice Laura, quien esta semana obtuvo su título universitario en teatro.

Ella junto con más de 6,500 estudiantes de la Universidad Cal State Los Ángeles regresaron esta semana a su alma mater para su ceremonia de graduación celebrada en el estadio de béisbol Reeder Field. Pero esta vez a la tradicional vestimenta de graduación se le agregaron las mascarillas para protegerse de la pandemia de covid-19.

Laura dice que su ceremonia de graduación estaba planeada para celebrarse en mayo, pero se retrasó hasta esta semana. “Al principio fue decepcionante. Sentía como si nuestros logros no valieran”.

Pero cuando finalmente se llevó a cabo la graduación, dice que fue un sentimiento extraño porque covid-19 aún está presente.

Sin embargo, la vacuna le dio confianza. “Mi familia y yo ya estamos vacunados, y eso nos hizo sentir más seguros. Durante la ceremonia, hubo un poco de distancia social, aunque algunos ya después se quitaron la mascarilla”.

Las graduaciones en Cal State LA fueron muy emotivas, después de que los estudiantes se vieron forzados a terminar sus clases de manera virtual debido a la pandemia. Llevaban más de un año de no pisar el campus; y en los dos días de graduaciones se reunieron alumnos de la generación 2020 y 2021 de los colegios de Estudios Étnicos, Ciencias Sociales y Naturales, y Negocios y Economías.

El presidente de Cal State LA, William A. Covino dedicó un mensaje especial a los graduados:

“No renunciaste a tu sueño de obtener un título universitario. Continuaste estudiando, aprendiendo, sirviendo a los demás, cuidando a tu familia y esforzándote por alcanzar tu meta, a pesar de todos los desafíos que causó la pandemia.

“Incluso aún cuando el mundo a tu alrededor parecía desmoronarse, trabajaste y te preparaste para construir un mundo mejor. Este enfoque es lo que significa ser un águila dorada”.

El águila dorada es el símbolo de la fuerza y el espíritu de Cal State LA. Por eso les dijo a los graduados, que están equipados para servir y elevar a las comunidades.

“Cuidarnos unos a otros es tu superpoder. La compasión ante el sufrimiento es tu superpoder. El conocimiento y la habilidad para marcar la diferencia es tu superpoder”.

Y cuando dijo: “Marvel tiene a los Vengadores, pero nosotros te tenemos a ti, las Águilas Doradas. Ustedes son los superhéroes que nuestro mundo necesita”, cayó una cascada de aplausos. 

Graduación retrasada

Marlene Vázquez terminó sus estudios en salud pública en diciembre, pero su ceremonia se celebró apenas el martes 27 de julio, después de que su último año de universidad, tomó todas sus clases en línea a causa de la pandemia.

“Fue un poco difícil porque uno se distrae en línea más fácilmente; y al no ir a la universidad, no puedes aprovechar las instalaciones como la biblioteca donde yo iba a estudiar”.

Y dice que no podía creer cuando escuchó su nombre durante la ceremonia de graduación mientras su familia gritaba entusiasmada. “De 5 hermanos que somos, yo soy la tercera que va a la universidad”.

Marlene nació en el país, pero sus padres son de Jalisco, México. “Para mi fue muy importante que mi familia estuviera ahí porque yo pensé que por la pandemia, mi ceremonia iba a ser virtual. Me sentí muy feliz y todo fue con distancia social”.

Los protocolos de covid-19 puestos en marcha por Cal State LA para las graduaciones incluyeron: hacerse un autoexamen sobre los síntomas de covid antes de ir al campus; no acudir si han salido positivos al virus en los pasados 10 días, o si han estado en contacto con una persona infectada en los últimos 14 días, o a quienes su médico les ha pedido ponerse en cuarentena.

Les hicieron ver que es importante que entiendan el riesgo de asistir a un evento masivo donde el estatus de vacunación de otros de los que asistan, puede ser desconocido.

Se les exigió a todos los asistentes usar mascarillas apropiadas que cubran nariz y boca en todas las instalaciones de Cal State LA, excepto al consumir comida o bebidas.

Los graduados pudieron remover sus mascarillas para tomarse la foto de la graduación en el escenario.

Se les pidió dar aviso de inmediato a Cal State LA si salieron positivos a covid-19 en las siguientes 48 horas después de asistir al evento.

Reconocimiento nacional

Laura, residente de Boyle Heights, quien se graduó de licenciatura en teatro en Cal State LA, dice que en un par de años quiere estudiar una maestría en ciencias ambientales para aplicar esos conocimientos al diseño escénico.

“Contrario a lo que muchos piensan, existen muchas oportunidades de trabajo en el arte. En la industria del entretenimiento hay mucho desperdicio de electricidad y otros materiales, y parte de mi trabajo, ya con la maestría será aprovechar el material desperdiciado en el diseño de escenarios teatrales”.

Y platica que tal vez esa vocación, le viene de su padre quien antes de emigrar a México estaba estudiando para arquitecto. “Para diseñar edificios en la arquitectura, se requiere hacer planos y tomar medidas, y lo mismo ocurre en el diseño teatral, tienes que planear y medir”.

Laura trabajó en el Departamento de Teatro y Danza, y fue diseñadora de producción de la obra Guerra de los Mundos basada en la novela de H.G. Wells, que se transmitió de manera virtual durante la pandemia.

Bajo su producción, diseñó pasillos de hospitales diezmados, cuerpos sangrientos, calles devastadas. Su trabajo de diseño escénico le hizo recibir una mención honorífica en el Kennedy Center American College Theater Festival en el que participan 18,000 estudiantes al año.

Doctorado honorario

José Quetzal Flores, fundador de la banda Quetzal, ganadora del premio Grammy, recibió un doctorado honorario de Cal State LA y pronunció un discurso para los estudiantes en la ceremonia de graduación.

“Me avisaron de este reconocimiento el año pasado antes de la pandemia, pero luego se pospuso la ceremonia de entrega hasta esta semana. Para mí representa un logro para toda una comunidad porque yo no hago música solo sino en conjunto”.

Quetzal, quien nació en Salinas, California y creció en los barrios de El Sereno y Lincoln Heights en Los Ángeles, dedicó el doctorado honorario a sus padres y a su familia.

“Mis padres fueron y son organizadores; y yo me he dedicado a organizar por la justicia social y he pasado mucho tiempo en México en diferentes comunidades”.

Afirma que no tiene una educación formal y se educó en las calles. “La sociedad la ve de menos, pero no es así. Yo valoro mucho la enseñanza que recibí de mis mentores. Aprendí toda esa música tradicional, de las enseñanzas de ‘las doñas’ de Boyle Heights y de la inteligencia de nuestras comunidades y de las mamás solteras que trabajan y son verdaderas economistas”.

Quetzal felicitó a los estudiantes por graduarse a pesar de la violencia policiaca contra las comunidades latinas y de los políticos que no nos protegieron durante la pandemia, y no nos garantizaron cosas básicas como las vacunas. “A pesar de todo eso, pudieron terminar sus estudios”.

Y felicitó a sus padres que han emigrado de diferentes lugares. “No subieron a un avión para venir a este país. Se subieron a ‘la bestia’ – un mortal tren de carga en el sur de México al que los inmigrantes centroamericanos se suben a los techos para cruzar el suroeste -, cruzaron penosas fronteras para que sus hijos tuvieran las oportunidades que ellos hubieran querido”.

También pidió un reconocimiento para los ancestros porque pese al genocidio y terror causado por la colonización pudieron cargar y regalarnos esta herencia. 

Y a los graduados de la carrera de arte, les dijo que esta industria es cruel y a veces, te quita la humanidad, pero hay buenas noticias, “tenemos la herencia de los valores de nuestra dignidad y como cuidar a los demás; y hay manera de entrar y ser artistas, productores y guardianes de la cultura”.