Por causas desconocidas murió una orca en el parque SeaWorld de San Diego
La ballena asesina enfermó repentinamente el 18 de agosto; especialistas le practicarán exámenes post mortem para conocer las causas
Una orca en un parque marino de Francia. Crédito: VALERY HACHE | AFP / Getty Images
De manera inesperada, una orca murió el jueves pasado en SeaWorld de San Diego, informó el acuario y parque temático.
Las causas que provocaron la muerte de Amaya, ballena asesina de 6 años, todavía son desconocidas, por lo que veterinarios realizarán los estudios post mortem, que podrían demorar algunas semanas en concluir.
En un comunicado, el parque temático informó que la orca había enfermado recientemente.
“Amaya comenzó a mostrar signos de enfermedad el 18 de agosto y los especialistas en cuidado animal y veterinarios comenzaron a tratarla inmediatamente. A pesar de los esfuerzos del equipo de atención, la salud de Amaya se deterioró rápidamente. Su muerte fue repentina e inesperada”, indicaron en el comunicado.
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El acuario indicó que estaban con el corazón quebrado los especialistas que cuidaban a la orca.
En su sitio web, SeaWorld de San Diego describía a Amaya como la orca más joven del parque y disfrutaba el tiempo junto con su madre Kalia y su padre Ulises.
“Amaya es una de las ballenas más juguetonas y le encanta interactuar con sus especialistas en cuidado de animales. Nos ha ayudado a recopilar y compartir información fundamental sobre el desarrollo de las crías para los investigadores que estudian las poblaciones silvestres”, mencionaron.
Amaya formaba parte de las 10 ballenas de SeaWorld de San Diego.
Con historia de protestas por los derechos de los animales
En 2016, SeaWorld había anunciado el cierre de su programa de cría de orcas después de años de protestas por los derechos de los animales y el cambio de la opinión pública sobre las orcas en cautiverio.
Las quejas se hicieron más intensas después del documental Blackfish, en 2013, centrada en la vida de una orca llamada Kilikum, responsable de matar a la entrenadora Dawn Brancheau cuando la arrastró a una piscina en el SeaWorld de Orlando, en 2010.
Kilikum era la figura estelar del parque, pero los efectos de estrés por el encierro provocaron que la orca atacara en varias ocasiones a seres humanos que resultaron en fallecimientos.
La orca fue aislada y murió después de una infección respiratoria, sin cuidados.
Posteriormente, SeaWorld también hizo público que terminaría con los espectáculos de orcas en sus parques temáticos.
En 2017 murió la última orca nacida en cautiverio en el antiguo programa de SeaWorld. La cría de tres meses estaba bajo tratamiento por una infección en el parque de San Antonio, en Texas.
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