Los riesgos de los programas Compra ahora, paga después


A medida que la temporada de compras navideñas avanza a toda marcha, cada vez más consumidores optan por los planes “compra ahora, paga después”, que te permiten espaciar los pagos de tus facturas a lo largo de más semanas, generalmente sin intereses ni comisiones.

Cada vez más minoristas, entre ellos Amazon, Shopify y Walmart, ofrecen planes de pago, tanto en línea como en las tiendas. El arreglo de pago habitual podría permitirte abonar el 25% del precio de la compra y luego hacer 3 pagos iguales durante 6 semanas.

Para ofrecer estas opciones, muchos comerciantes se han asociado con empresas tecnofinancieras como Affirm y Klarna. Pero los bancos, los emisores de tarjetas de crédito y los servicios de pago, incluidos American Express y PayPal, ofrecen sus propios planes de pago flexible.

Aproximadamente un tercio de los compradores han utilizado el financiamiento del programa “Compra ahora, paga después” (BNPL), según una encuesta reciente de Lending Tree, plataforma de préstamos en línea. De los que optaron por dicho financiamiento, el 62% manifestó que lo había hecho 5 veces o más, y el 81% afirmó que lo volvería a hacer.

“Son cifras notables para un producto relativamente nuevo. A los consumidores les encanta y es probable que haya llegado para quedarse”, indica Matt Schulz, jefe de análisis de la industria en Lending Tree.

Sin embargo, existen riesgos financieros al momento de elegir un plan BNPL, especialmente si incumples un pago.

Según un estudio reciente de Credit Karma, el 34% de los consumidores que utilizaron los servicios de BNPL se retrasó en uno o más pagos. De ese porcentaje, los compradores más jóvenes eran mucho más propensos a retrasarse, más de la mitad de los denominados generación Z y los milenios (millenials) señalaron que no cumplieron con un pago en comparación con el 22% de la generación X y el 10% de los baby boomers.

Los pagos atrasados pueden generar comisiones o incluso colocarte en las listas de morosos, según los términos del proveedor de BNPL. La encuesta de Credit Karma reveló que el 72% de quienes no cumplieron con un pago manifestó que pensaba que su puntaje crediticio había caído como consecuencia de esa situación. 1 de cada 3 en ese grupo dijo que su puntaje crediticio disminuyó significativamente.

Estas sanciones pueden tomar a algunos consumidores por sorpresa, quienes pueden perder el control de sus pagos o utilizar más de un plan BNPL. Los términos de los proveedores suelen diferir, algunos cobran cargos por pagos atrasados o informan a las agencias de informes crediticios, mientras que otros no lo hacen.

“Los consumidores no siempre entienden cómo funcionan estos programas de préstamos o qué ayuda pueden esperar si algo sale mal”, manifiesta Chuck Bell, defensor de políticas financieras de Consumer Reports.

Entonces, antes de optar por un plan “compra ahora, paga después”, analiza con atención estas pautas.

Analiza detenidamente tus gastos

Es posible que tu prestamista de BNPL te permita gastar $100 o hasta $1,000 en una sola compra, pero ¿es necesario que lo hagas? Tal como estableció la encuesta de Lending Tree, dos tercios de los consumidores dijeron que normalmente gastaban más usando estos planes de lo que gastarían si tuvieran que pagar el monto total al momento de la compra.

Antes de hacer clic en “comprar ahora”, fíjate bien tu presupuesto e ingresos para calcular cuánto efectivo ingresará para cubrir los pagos. 

Una vez que comprendas tus límites de gasto, asegúrate de apegarte a ellos, tal vez puedes hacer una lista de compras planificadas. Y reserva una cuenta para esos pagos futuros. 

“Debes asegurarte de tener realmente el dinero reservado para cuando venzan esas facturas”, afirma Marguerita Cheng, planificadora financiera certificada en Gaithersburg, Maryland.

Ten cuidado con las trampas en las preguntas frecuentes

“Estos servicios de pago después ofrecen planes de todo tipo, algunos tienen comisiones e intereses y otros no”, explica Schulz. “Es fácil confundirse, especialmente si tienes más de un prestamista”.

Por lo tanto, consulta los términos del préstamo en el sitio web del prestamista, que suelen estar en la página de asistencia o de preguntas frecuentes, o llama para preguntar. ¿Existe un cargo por pago atrasado que se imponga automáticamente? ¿Puedes obtener una exención si pagas con solo un día de retraso? Si te atrasas con un pago o si no pagas, ¿informarán a una agencia de crédito, lo que posiblemente perjudique tu puntaje crediticio?

Asegúrate de conocer las reglas para el tipo específico de préstamo que piensas usar, porque algunos prestamistas brindan más de un tipo de programa de financiamiento.

Establece pagos automáticos

Un análisis realizado el año pasado por Cornerstone Advisors, una firma de consultoría bancaria en Scottsdale, Arizona, descubrió que los consumidores pueden perder fácilmente el control de sus pagos. Un motivo es que estas facturas son a corto plazo y vencen cada 2 semanas en lugar de mensualmente, lo que puede prestarse a confusión.

Algunos consumidores también consideran que el cargo por pago atrasado es un costo menor, pero eso puede invalidar el propósito de usar estos programas, sostiene Ted Rossman, analista de la industria en CreditCards.com.

Supongamos que terminas pagando $30 de recargo por retraso sobre un artículo de $100. Eso genera un aumento real del precio del artículo en un 30%. Si no tienes suficiente dinero en el banco para pagar esa factura, es posible que además se aplique un cargo por sobregiro de $35.

La forma infalible de evitar estos costos es automatizar todo el proceso. Programa pagos regulares a través de tu cuenta o tarjeta bancaria.

También puedes configurar recordatorios por mensaje de texto o por correo electrónico que te avisen cuando vencen los pagos. Algunos prestamistas lo hacen automáticamente.

Utiliza minoristas de confianza

A menos que gastes una pequeña cantidad de dinero que no te haga falta, un programa de préstamos en cuotas no es una buena forma de probar un producto o servicio nuevo, particularmente ahora que abundan los problemas en la cadena de suministro y hay muchas demoras en los envíos.

“Si estás utilizando un plan ‘compra ahora y paga después’, probablemente lo mejor sea comprar en tiendas conocidas, que tengan un historial de entregas puntuales y que respondan rápidamente si hay un problema con la compra”, sostiene Rossman.

También te sugerimos que lo pienses dos veces antes de usar estos planes para organizar viajes, por ejemplo, si piensas comprar pasajes de avión, explica Bell, especialmente cuando se trata de sitios de reserva de viajes en línea. Puedes encontrarte con políticas de reembolso inflexibles si los planes de viaje cambian o se cancelan.

Mejor considera usar una tarjeta de crédito

Si bien los préstamos en el punto de venta pueden ser convenientes, es posible que a largo plazo sea mejor usar una tarjeta de crédito, siempre que puedas pagar el saldo completo a tiempo.

“Si usas una tarjeta de crédito, puedes generar un buen puntaje crediticio, lo cual es importante para tus finanzas en general”, proclama Schulz. También puedes obtener recompensas por tus compras, como reembolsos en efectivo o descuentos, que pueden aumentar tu presupuesto.

Además, tendrás más protección al consumidor si usas una tarjeta de crédito. Además de investigar los cargos en disputa, algunos emisores ofrecen protección de compra, que cubrirá los costos si alguien roba los artículos o si llegan dañados.

Pide ayuda cuando la necesites, vale la pena realizar un pago más temprano que tarde.

Nota del editor: Este artículo, publicado originalmente el 30 de noviembre de 2021, ha sido actualizado para incluir información sobre una reciente investigación de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor.

Consumer Reports is an independent, nonprofit organization that works side by side with consumers to create a fairer, safer, and healthier world. CR does not endorse products or services, and does not accept advertising. Copyright © 2021, Consumer Reports, Inc.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain