‘Jet lag social’: cómo puede afectarte el tiempo frente a la pantalla a altas horas de la noche

Si un adolescente está luchando con problemas emocionales, tal vez esté sufriendo de “desfase horario social”.

El jet lag social es la diferencia entre las necesidades naturales de sueño (o cronotipo) de nuestro cuerpo y el tiempo que las tareas sociales, incluidas las redes sociales, nos mantienen despiertos.

Los expertos en salud ahora han descubierto que el tiempo frente a la pantalla a altas horas de la noche es una causa principal del desfase horario social, que luego aumenta en gran medida el riesgo de problemas psicológicos entre los adolescentes.

“El uso de pantallas antes de dormir se asoció con un cronotipo más tardío y luego con un mayor desfase horario social, que se relacionó aún más con niveles más altos de problemas emocionales”, escribieron los autores del estudio, publicado en el Journal of Affective Disorders .

Los investigadores recopilaron datos de dos encuestas diferentes realizadas entre más de 4000 estudiantes de secundaria chinos.

Los participantes de la encuesta informaron sobre el uso de la pantalla antes de dormir, su cronotipo (el horario de sueño innato del cuerpo) y cualquier problema emocional que pudieran estar experimentando.

Los investigadores encontraron que los adolescentes que usaban pantallas, incluidos teléfonos celulares, tabletas y computadoras, antes de dormir tendían a tener un cronotipo más tardío y experimentaban un mayor desfase horario social.

Este mayor grado de desfase horario social y la interrupción de sus ritmos naturales de sueño pone a los adolescentes en un mayor riesgo de problemas emocionales o psicológicos.

Además, el estudio reveló que los adolescentes con cronotipos más tardíos tenían dificultades para hacer frente a los horarios sociales tempranos, como el comienzo temprano de la escuela. Esta desalineación exacerbó el desfase horario social y los problemas psicológicos.

El estudio destaca la importancia de fomentar hábitos saludables frente a la pantalla entre los adolescentes y ser conscientes de sus patrones naturales de sueño para apoyar su salud mental.

“Los hallazgos sugirieron que se deben desarrollar hábitos saludables de uso de los medios y se deben diseñar estrategias de intervención dirigidas a las características circadianas para promover la salud emocional en la población adolescente”, escribieron los autores del estudio.

Entre las limitaciones del estudio, reconocieron los autores, está el hecho de que los datos de la encuesta se basaron en autoinformes de los participantes del estudio, lo que podría estar sujeto a sesgos de informes y errores de memoria de los participantes.

Una serie de problemas de salud se han relacionado con horarios de sueño irregulares, especialmente entre los “noctámbulos”, cuyo cronotipo los lleva a quedarse despiertos hasta altas horas de la noche y a dormir hasta tarde.

Investigaciones recientes han encontrado una razón por la cual los noctámbulos a menudo tienen peor salud: tienden a fumar más y beber más alcohol que aquellos que se levantan y brillan más temprano.

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