Aumentan robos residenciales en Los Ángeles
Pareja de colombianos facilitaba renta de autos a ladrones sudamericanos
Juan Carlos Thola-Durán, conocido como “El Parcero” y su pareja con quien convivía, Ana María Arriagada, de 41 años, alias “Parcera”, podrían ser condenados hasta 20 años de prisión federal por lavado de dinero y haber facilitado automóviles a un grupo de ladrones sudamericanos que participaron en delitos de allanamiento de morada y robos en el sur de California, y en algunos estados de Estados Unidos.
Según la acusación formal dada a conocer por el fiscal federal de los Estados Unidos, Martín Estrada, Thola-Durán, de 57 años, residente de Canyon Country, en el Valle de Santa Clarita, y Ana María Arriagada, de 41 años, controlaban y operaban la empresa Driver Power Rentals (DPR), un negocio de arrendamiento o venta de autos en Van Nuys. Arriagada era la dueña registrada de DPR.
En el grupo criminal que lideraban Juan Carlos Thola-Durán, Ana María Arriagada, también fueron aprehendidos otros cuatro acusados: John Carlo Thola, Patricia Enderton, alias “Paty”, Miguel Ángel Barajas y Federico Jorge Triebel IV.
Un gran jurado federal imputó mediante una acusación formal de 46 cargos contra Juan Carlos Thola-Durán, bajo el alegato de que el hombre del Valle de Santa Clarita facilitó un grupo de turismo criminal consistente de sudamericanos y otras personas que participaron en robos con allanamiento de morada, hurtos y otros delitos por todos los Estados Unidos y luego lavaron millones de dólares estadounidenses en ganancias ilícitas.
La acusación formal, dictada el 1 de agosto, inculpa a los acusados de varios delitos graves, entre ellos fraude electrónico, lavado de dinero, asociación delictuosa y la estructuración de transacciones a modo de evadir los requisitos federales de presentación de informes financieros.
Las actividades del grupo criminal se produjeron desde al menos enero de 2018 hasta el 25 de julio de 2024. Ellos operaban en los condados de Los Ángeles, Ventura, Orange, Santa Bárbara y Riverside.
Juan Carlos Thola-Durán, alias “Parcero”, dirigía a sus cómplices para que viajaran a varias partes de los Estados Unidos para cometer robos, robo de tarjetas de crédito y débito de las víctimas, incluido, además, el hurto de bienes en tiendas como Target, Best Buy, Home Depot, así como en residencias y negocios comerciales.
Después de cometer los robos de las tarjetas de crédito y tarjetas de regalo, los ladrones compraban productos electrónicos, carteras de diseñador, otros artículos de lujo de alta gama u otros artículos, antes de que las tarjetas robadas pudieran congelarse o cancelarse.
A través del negocio de arrendamiento y venta de autos DPR, Thola-Durán y su pareja, Ana María Arriagada, proporcionaban los vehículos e identificaciones falsas a sus cómplices de los robos, y hacían parecer que la transacción del alquiler del auto era legítima.
“Desde 2019, hemos arrestado a más de 130 sospechosos responsables de perpetrar estos delitos [robos residenciales y en negocios comerciales], y la gran mayoría utilizó automóviles suministrados por Driver Power Rentals,” dijo el alguacil del condado de Ventura, James Fryhoff.
“Nuestros esfuerzos no terminan ahí. Nos asociamos formalmente con el FBI y creamos el Grupo de Trabajo contra Robos Mayores del Condado de Ventura. Este grupo de trabajo ha sido fundamental para presentar cargos federales contra Thola-Durán y otros miembros de su organización criminal”.
“Lavado de dinero”
Después que los ladrones cometían sus fechorías, entregaban la mercancía robada a Juan Carlos Thola-Durán y Ana María Arriagada en la empresa Driver Power Rentals.
También la enviarían por correo a otros cómplices, entre ellos Miguel Ángel Barajas, de 57 años, de Northridge, u otros cómplices en una tienda FedEx de Sherman Oaks.
Por instrucción de Thola-Durán, los acusados Barajas, John Carlo Thola, de 33 años, residente de Canoga Park, y otros recogían los paquetes y luego se los entregaban al líder de la banda.
Juan Carlos Thola-Durán se desempeñaba como “comerciante de artículos robados” y compraba los artículos, a una fracción de su valor en el mercado minorista, y les pagaba a los ladrones un porcentaje del valor de los artículos.
Luego, procedió a vender la mercancía a otros compradores de artículos robados por un total aproximado de $5.5 millones de dólares, incluidos aproximadamente $5.1 millones de dólares enviados a diversas cuentas bancarias controladas por los conspiradores.
Con el dinero acumulado, los acusados se dedicaron a comprar bienes inmuebles, caballos y estructuraron retiros de dinero en efectivo de manera que evitaran activar el requisito de que los bancos presenten informes al Departamento del Tesoro de los Estados Unidos sobre transacciones que exceden de $10,000 dólares.
Y, por si fuera poco, desde mayo de 2020 hasta junio de 2021 Thola-Durán, Arriagada y otros se asociaron para obtener de manera fraudulenta $274,998 dólares en préstamos de auxilio financiero para negocios afectados por la pandemia de Covid-19.
Un problema cada vez mayor”: Gascón
El fiscal de distrito del condado de Los Ángeles, George Gascón reconoció que ha habido un aumento en los robos residenciales, especialmente los robos con allanamiento de morada.
“Francamente hemos visto que esto se ha convertido en un problema cada vez mayor en todo el país”, dijo Gascón en una rueda de prensa. “Estamos lidiando con nuestro problema local, y hemos trabajado con múltiples grupos para abordar el desafío que enfrentamos”.
Gascón indicó que la problemática no es la misma en muchas otras comunidades.
“Por nuestro tamaño, si nosotros fuéramos un estado, seríamos el octavo estado más grande de Estados Unidos; tenemos 88 ciudades y contamos con 44 agencias policiales”, dijo.
En cuanto al territorio, “somos muy vastos”, añadió.
“Lo que vemos, es que un grupo particular de individuos puede estar actuando en una parte de nuestro condado, y eso está siendo tratado por una agencia de aplicación de la ley, pero también pueden estar actuando en otra parte del condado, y la conexión entre ambos [ciudad y condado] no podrá realizarse”.
¿Qué es un grupo de turismo criminal?
Los grupos de turismo criminal para robo consisten en personas, a menudo oriundas de Sudamérica y otros lugares fuera de los Estados Unidos, que participan en robos con allanamiento de morada, hurtos y otros delitos por todo el país.
Como parte del modo de operación de los grupos de turismo criminal para robo, las personas ingresan a los Estados Unidos y participan en oleadas de delitos de robo.
Con frecuencia, las ganancias de los robos se comparten con los facilitadores del ingreso a Estados Unidos y coconspiradores, quienes ayudan a los turistas delictivos a cometer sus delitos, así como con otras personas tanto dentro como fuera de los Estados Unidos.
“El turismo criminal es un problema importante que afecta no sólo al sur de California, sino a toda nuestra nación”, dijo recientemente el fiscal federal Martín Estrada.
“Estos acusados facilitaron y dirigieron el turismo criminal y cometieron cientos de robos en todo el país; actuaron como mariscales de campo de un equipo de ladrones”, añadió.
Algunos robos y la forma de operar
Abril 26 de 2019, en Bellevue, Washington: Los ladrones robaron tarjetas de crédito a una víctima, y compraron aproximadamente $4,000 en joyas en Macy’s.
Febrero 17 de 202, en Newbury Park: Tholan Duran y otros cuatro cómplices robaron tarjetas de crédito del automóvil de la víctima “I.A”, que estaba estacionado en un sendero, y compraron
joyas por aproximadamente $1,608 en JC Penney’s en The Oaks Mall en Thousand Oaks, California.
5 de mayo de 2021, en Mission Viejo: Los ladrones manejaron un auto proporcionado por la pareja líder de la banda criminal y robaron tarjetas de débito pertenecientes a la víctima “K.B.”, que había estacionado su automóvil en el parque James G. Gilleran.
Los ladrones usaron la tarjeta de débito robada para realizar 19 compras por un total aproximado de $9,541 en tres tiendas Target diferentes en Mission Viejo, Aliso Viejo e Irvine, California.
23 de octubre de 2021, en Colorado: Los ladrones le robaron la billetera a la víctima “T.T.” mientras estaba de compras em Whole Foods en Denver, Colorado, luego usaron la tarjeta de crédito robada para comprar una tarjeta de regalo de $200 en una tienda Target en Glendale. Colorado, e intentaron una compra de aproximadamente $5,000 en una tienda departamental.
3 de septiembre de 2021, en New Port Richey, Florida: El grupo de rateros irrumpieron en un automóvil que estaba estacionado en
Starkey Wilderness Park en New Port Richey, Florida, y robaron cinco tarjetas de crédito y $400 de una billetera perteneciente a las víctimas “A.F., D.F. y L.M.”. Usaron dichas tarjetas para comprar $8,000 en tarjetas de regalo de Home Depot.