Ford es superado por un emergente gigante asiático
BYD, el mayor fabricante mundial de vehículos eléctricos e híbridos enchufables, ha logrado un nuevo hito: superar en ventas trimestrales a Ford

Bronco Ultimate Sasquatch. Crédito: Ford. Crédito: Cortesía
El panorama automotriz global está cambiando rápidamente, y China está liderando la revolución. En el tercer trimestre del año, BYD, el fabricante chino de vehículos eléctricos e híbridos enchufables, no solo consolidó su posición como líder en su segmento, sino que también superó a Ford en ventas globales.
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Este impacto, aunque esperado, marca un antes y un después en la industria, subrayando la creciente influencia de las marcas chinas en un mercado históricamente dominado por gigantes norteamericanos, europeos y japoneses.
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Con 1.13 millones de vehículos entregados entre julio y septiembre de este año, BYD registró un crecimiento del 38% en comparación con el mismo período de 2023.
Ford, en cambio, alcanzó 1.09 millones de unidades, quedando relegado al séptimo puesto del ranking global. Este cambio en la clasificación no solo refleja la debilidad de las marcas tradicionales en un entorno competitivo, sino también la fortaleza de una estrategia que apuesta por la electrificación masiva.
Un nuevo jugador en la cima del mercado
El avance de BYD no es casualidad. Desde hace años, la compañía ha centrado sus esfuerzos en democratizar la movilidad eléctrica con modelos que combinan precios competitivos, tecnología avanzada y un fuerte enfoque en la sostenibilidad.
Este enfoque, alineado con las políticas gubernamentales chinas de apoyo a la industria de vehículos eléctricos, ha permitido a BYD alcanzar cifras impresionantes y colocarse como un rival formidable para marcas tradicionales como Ford, Volkswagen y Toyota.
Aunque el dominio de BYD en el mercado de vehículos eléctricos e híbridos enchufables es evidente, lo más notable es su capacidad para competir directamente con fabricantes que producen vehículos de combustión interna, un segmento históricamente más amplio.
En este contexto, la marca también se acercó al Grupo Stellantis, cuarto mayor fabricante del mundo, que vendió apenas 10,000 unidades más que BYD en el mismo trimestre.
¿Qué significa esto para los líderes actuales?
Toyota, el mayor fabricante de automóviles del mundo, no está exento de los desafíos planteados por BYD. Aunque la compañía japonesa sigue liderando el mercado con 2.73 millones de unidades entregadas en el tercer trimestre, ha experimentado una caída del 4% en sus ventas.
De manera similar, el Grupo Volkswagen, con 2.17 millones de unidades, y el Grupo Hyundai, con 1.77 millones, han registrado descensos del 7% y 3%, respectivamente.
Estas cifras subrayan una tendencia: mientras los fabricantes tradicionales luchan por mantener su posición en un mercado que cambia rápidamente, las marcas chinas, lideradas por BYD, ganan terreno gracias a su enfoque en la electrificación y su capacidad para adaptarse a las demandas del consumidor moderno.

Los otros gigantes chinos: Geely y Chery
El éxito de BYD es solo la punta del iceberg. Otras marcas chinas también están aumentando su presencia global. Geely, por ejemplo, registró un crecimiento del 14% en el tercer trimestre, alcanzando 820,000 unidades y ocupando la novena posición mundial, detrás de Honda pero superando a Nissan.
Por su parte, Chery experimentó un crecimiento del 27%, entregando 550,000 vehículos y asegurando el duodécimo puesto en el ranking global.
Estos resultados reflejan un cambio más amplio en la dinámica del mercado automotriz global, donde las marcas chinas no solo están creciendo en volumen, sino también en reputación, gracias a su enfoque en tecnología avanzada, diseño atractivo y precios competitivos.
Proyecciones para el futuro
Si BYD mantiene su ritmo de crecimiento, es probable que cierre el año con más de 4 millones de unidades vendidas, consolidándose en el sexto puesto global y quizás incluso superando a Stellantis para entrar al top 5.
Este ascenso también plantea preguntas sobre el futuro de las marcas tradicionales, muchas de las cuales están luchando para adaptarse a la transición hacia vehículos eléctricos.
El éxito de BYD también resalta la importancia de una estrategia integral que combine innovación tecnológica, eficiencia en la producción y un entendimiento profundo de las necesidades del mercado.
Para Toyota, Volkswagen, Ford y otros líderes, el mensaje es claro: adaptarse o correr el riesgo de quedarse atrás.
Este golpe de BYD a Ford es más que una simple estadística trimestral; es un reflejo del cambio sísmico que está transformando la industria automotriz global.
Con una combinación de visión estratégica, apoyo gubernamental y productos de alta calidad, BYD no solo está compitiendo con los grandes nombres de la industria, sino que también está redefiniendo las reglas del juego.
A medida que las marcas tradicionales enfrentan desafíos sin precedentes, los fabricantes chinos como BYD, Geely y Chery están demostrando que la electrificación no es solo el futuro, sino también el presente. Y en este presente, China está liderando la carga.