Amplían fecha de solicitudes para el programa Al Fresco en restaurantes
Lanzado durante la pandemia de covid en 2020 ha sido de gran ayuda para los restauranteros
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass anunció esta semana la extensión del período de transición para la fecha límite de solicitud del Programa Al Fresco que permite que los restaurantes vendan comida al aire libre, en aceras, calles y estacionamientos alrededor de sus negocios.
También dio a conocer la asistencia a miles de empresas a través de procesos simplificados, servicio al cliente enfocado y programas específicos para apoyar la creación, el desarrollo y el crecimiento de pequeñas empresas en la ciudad.
“Miles de empresas han recibido ayuda este año aprovechando nuestro impulso para convertir al Ayuntamiento en un defensor de las empresas, no en una barrera”, dijo la alcaldesa Bass.
“Es por eso que estamos ampliando la fecha límite del programa de comedor al aire libre Al Fresco, porque debemos apoyar a las empresas y ayudarlas a prosperar”, agregó.
Este es el segundo año que la fecha límite se amplía en un esfuerzo para que más negocios se beneficien.
El programa Al Fresco fue lanzado durante la pandemia de covid en el 2020 por el alcalde Eric Garcetti como un programa temporal para que ante las restricciones sanitarias, los restauranteros pudieran vender sus alimentos en los espacios al aire libre alrededor de sus negocios.
Debido al éxito, la ciudad de Los Ángeles hizo permanente el programa, autorizando permisos a los restaurantes que quieran vender comida en mesas a la intemperie.
Preocupación por el costo
“Este es el primer año que la Ciudad de Los Ángeles nos cobra por el permiso. Antes era gratis”, dijo Ana Lilia Sánchez quien junto con su esposo Valentin Granja son dueños del restaurante Sabores Oaxaqueños.
“Tenemos seis mesas afuera y hemos puesto carpas para que el cliente esté cómodo”, dice Ana Lilia.
Comenta que durante la pandemia, cuando no se permitía la venta de comida en interiores, el programa Al Fresco fue muy favorable.
“Nos dio acceso a vender afuera; algo que no podíamos hacer antes; y eso nos ayudó a sobrevivir”, dice.
Sin embargo, comenta que debido a que los últimos dos meses, las ventas han estado muy bajas, les preocupa el alto costo que pide la Ciudad de Los Ángeles por el permiso para vender al aire libre.
“No sabemos cómo se va a poner esto, una vez que entre el nuevo presidente. Nuestra comunidad tiene miedo, y es posible que ya no quieren salir a comer a la calle porque no saben qué les espera”, dice.
Comenta que la proliferación de vendedores ambulantes que venden comida en las banquetas, sin pagar impuestos ni cobros a la ciudad, representa asimismo una competencia para los restaurantes familiares.
Ana Lilia dice que el costo anual por el permiso para seguir vendiendo comida al aire libre bajo el programa Al Fresco, a ellos les salió $3,300, lo que ha representado un gasto fuerte sobre todo con la caída de las ventas.
Sabores Oaxaqueños se encuentra en: 3337 1/2 W 8th St, Los Angeles, CA 90005.
En diciembre de 2023, el Concejo de la Ciudad de Los Ángeles aprobó el programa Al Fresco de manera permanente, y comenzó a aceptar solicitudes desde febrero.
La alcaldesa dijo en ese momento que habría ayuda financiera para ayudar a los propietarios de los negocios a pagar por el permiso.
Un sacrificio que esperar recuperar
Don Arturo Aguilar, dueño del restaurante Valle Oaxaqueño, dice que sin duda implicará un sacrificio el pago del permiso, pero a largo plazo, confía en que a largo plazo vayan a recuperar lo que considera una inversión al negocio.
“Es verdad que las ventas han estado bajas, y con los gastos por las festividades, la gente no tiene mucho dinero para ir a comer a un restaurante, pero esperamos que ya pasando la Navidad, la situación mejore para nosotros”.
Considera que tal vez para un restaurante que solo tiene dos o tres mesitas afuera, no le conviene seguir en el programa Al Fresco por el costo del permiso.
“A nosotros en El Valle Oaxaqueño nos conviene. Así que vamos a seguir picando piedra porque es un gasto a la inversión, ya que a la gente le ha gustado comer afuera, y hemos arreglado el estacionamiento, de tal manera que se sientan a gusto todo el año”.
La alcaldesa Bass anunció esta semana la nueva extensión de la fecha límite para que los dueños de negocios con un permiso temporal soliciten el programa permanente y sigan ofreciendo cenas al aire libre a través del popular programa AlFresco.
Además su oficina dijo que se están poniendo a disposición más de $1 millón en asistencia financiera para apoyar a los restaurantes y brindar alivio para los permisos a medida que hacen la transición al programa permanente de la ciudad.
Según dijeron la alcaldesa alentó a los departamentos de la ciudad a centrarse en atender a los dueños de negocios para facilitar la transición al programa permanente y se contactó a más de 3,000 empresas con recursos de apoyo.
La Oficina de la Alcaldesa coordinó dos clínicas de solicitud en persona de ventanilla única en Van Nuys y Koreatown para reunir a los departamentos relevantes de la ciudad y brindar un servicio al cliente personalizado a casi 100 propietarios de restaurantes.