window._taboola = window._taboola || []; _taboola.push({article:'auto'}); !function (e, f, u, i) { if (!document.getElementById(i)){ e.async = 1; e.src = u; e.id = i; f.parentNode.insertBefore(e, f); } }(document.createElement('script'), document.getElementsByTagName('script')[0], '//cdn.taboola.com/libtrc/mycodeimpremedia-laopinion/loader.js', 'tb_loader_script'); if(window.performance && typeof window.performance.mark == 'function') {window.performance.mark('tbl_ic');}

Las sobredosis letales de drogas están disminuyendo en algunas partes de EE. UU.

Las muertes por sobredosis bajaron un 4 % en EE.UU., pero Alaska y el oeste registraron aumentos. La crisis de opioides sigue evolucionando con nuevas amenazas

1 de cada 10 adultos en los EE. UU. ha perdido a un familiar por sobredosis de drogas: estudio

La tasa de muertes causadas por el consumo de alcohol aumentó un 26 % entre 2019 y 2020. Crédito: Richardox | Shutterstock

Las muertes por sobredosis de drogas en Estados Unidos registraron un descenso del 4 % entre 2022 y 2023, de acuerdo con los últimos datos proporcionados por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

La reducción de las tasas de mortalidad por sobredosis marca un cambio positivo tras años de aumento, en gran parte atribuido a la pandemia de COVID-19 y al acceso limitado a servicios de apoyo. Sin embargo, el impacto no ha sido uniforme en todo el país, ya que algunos estados del oeste y Alaska han visto incrementos en sus cifras.

El informe de los CDC señala que la tasa de sobredosis fatales ajustada por edad se redujo de 32,6 muertes por cada 100.000 habitantes en 2022 a 31,3 en 2023. Una de las principales razones de esta mejora es la mayor disponibilidad de medicamentos como la naloxona, un fármaco capaz de revertir los efectos de una sobredosis de opioides, junto con la disminución del aislamiento social que caracterizó los años de la pandemia.

A pesar de esta tendencia alentadora, ciertos estados han desafiado la tendencia nacional con aumentos significativos en las tasas de sobredosis fatales. Alaska, Oregón y Washington reportaron cifras con 49,4, 40,8 y 42,4 muertes por cada 100.000 personas, respectivamente, superando la media nacional. Estos datos reflejan un patrón desigual en la crisis de sobredosis, donde algunas regiones logran avances mientras otras siguen viéndose afectadas de manera severa.

La crisis de los opioides sigue siendo el motor principal de estas muertes, en particular el consumo de opioides sintéticos como el fentanilo, cuya tasa de mortalidad descendió levemente de 22,7 a 22,2 por cada 100.000 habitantes en el último año.

Los números generales de las tasas de sobredosis se mantienen

Sin embargo, un informe reciente de Millennium Health advierte sobre una tendencia dentro de esta epidemia: el aumento del consumo combinado de fentanilo y estimulantes, lo que los expertos han denominado la “cuarta ola” de la crisis de sobredosis.

El estudio también destaca el resurgimiento del uso de heroína entre consumidores de fentanilo, lo que sugiere que la lucha contra los opioides continúa evolucionando y requiere respuestas adaptadas a estos nuevos patrones de consumo.

Otro dato relevante del informe de los CDC es que, incluso en regiones donde se han logrado descensos significativos en las tasas de sobredosis, los números absolutos siguen siendo elevados. Un ejemplo es Maine, donde la tasa de muertes por sobredosis disminuyó un 17,3 % entre 2022 y 2023, pero aún se mantiene alta, con 44,9 muertes por cada 100.000 habitantes, por encima del promedio nacional.

Los expertos señalan que, si bien la reducción de la tasa de sobredosis a nivel general es una señal esperanzadora, la crisis de los opioides está lejos de ser controlada. La combinación de sustancias, el acceso desigual a programas de reducción de daños y la presencia de drogas cada vez más potentes hacen que el problema persista como una amenaza de salud pública.

En respuesta a esta crisis, las autoridades han intensificado los esfuerzos para expandir la disponibilidad de naloxona y promover programas de tratamiento asistido con medicamentos, como la buprenorfina y la metadona.

Además, se están implementando iniciativas para mejorar la educación sobre el riesgo de los opioides sintéticos y facilitar el acceso a servicios de reducción de daños en comunidades especialmente afectadas.

Sigue leyendo:

En esta nota

sobredosis sobredosis de droga
Contenido Patrocinado