Una ciudad de California corta lazos con Wells Fargo por el Dakota Access Pipeline
Davis actualmente depende de Wells Fargo para manejar varios servicios de la ciudad
La ciudad de Davis, en el norte de California, ha acordado no renovar su contrato municipal con el banco Wells Fargo, esto luego que residentes denunciaron el involucramiento de la empresa con la construcción del polémico oleoducto Dakota Access.
El voto unánime, 5-0, se realizó el martes, con el cual los miembros del concilio acordaron contratar a otro banco o unión de crédito para manejar las finanzas de la ciudad.
Tal decisión se tomó luego que residentes denunciaron el rol del banco Wells Fargo como principal patrocinador del oleoducto en Dakota del Norte, cuyo paso pretende irrumpir en terreno de la tribu Standing Rock Sioux, y que también atravesará el río Missouri, fuente de agua potable para la reserva indígena.
Davis actualmente depende de Wells Fargo en cuestión de cuentas de banco, procesamiento de tarjetas de crédito para pagos de utilidades, resguardo de inversiones, entre otros servicios.
En diciembre del año pasado, el entonces presidente Barack Obama frenó la construcción de la tubería que trasladaría petróleo desde Dakota del Norte hacia Illinois, después que activistas ocuparon el sitio de operación del proyecto, pendiente a un análisis de parte del funcionarios federales.
Pero al tomar rienda de la Casa Blanca, Donald Trump reanudó el proyecto con la firma de una orden ejecutiva.
En una declaración el miércoles, Wells Fargo dijo los siguiente: “Si bien estamos decepcionados que la ciudad haya decidido poner fin a nuestra relación, estamos listos para apoyar a la ciudad con sus necesidades de servicios financieros en el futuro. Seguiremos invirtiendo en esta comunidad diversa y dinámica”.
El banco agregó que es una de las 17 instituciones financieras involucradas en financiar el oleoducto Dakota y que sus préstamos equivalen al 4.8 por ciento del monto total.
Con la decisión del martes, Davis se adjuntó a la lista de municipios que han acordado cortar lazos con el banco. La ciudad de Seattle, en Washington, acordó también no renovar su contrato con la empresa financiera por similares razones.
La ciudad de Sacramento el año pasado también decidió dejar de hacer negocios con Wells Fargo sobre la cuestión de la cuenta no autorizada. El banco dijo en octubre que estaba “decepcionado” con la decisión, aunque entendió “las preocupaciones que se han planteado”.