El sueño americano, en primera persona: la increíble historia de cómo el fútbol salvó la vida de Alfredo Sanchez
Contenido Patrocinado
Hijo de una pareja migrante de México, trabajó duro para lograr una carrera exitosa en Estados Unidos. Además de su trabajo como entrenador de fútbol profesional, es fundador y director creativo de la popular marca de ropa deportiva CVY, que, creada en 2020, es la preferida de muchas estrellas del fútbol. Su empresa actualmente patrocina jugadores profesionales y clubes, entre los que se cuenta el Detroit City FC. Nada sucedió de la noche a la mañana, y confiesa que aún hoy algunos días son difíciles. La perseverancia y la honestidad son sus valores guía para no dejarse abatir por los obstáculos.
—
Alfredo Sanchez está seguro de una cosa: el suyo es un camino de resiliencia. Integrante de una familia humilde que emigró desde México buscando una mejor vida en Estados Unidos, él siempre luchó por progresar a pesar de las adversidades. A los 16 años dejó la escuela para ir a trabajar y ayudar a su mamá a pagar las cuentas de un numeroso hogar que albergaba nueve hermanos. Su crianza estuvo marcada por diversas carencias, lo que no le dejó demasiado tiempo para vivir las típicas experiencias de los adolescentes.
Su pasión por el fútbol data desde que tenía memoria. Durante su infancia en la zona Este de Los Ángeles, se convirtió en el pilar que lo mantuvo alejado de las calles y le permitió mantener la perspectiva clara, incluso en momentos complicados. El cree que el fútbol no solo lo ayudó a sobrevivir, sino que también contribuyó a forjar su carácter determinado y confiable.
Este deporte se convirtió luego en la profesión que lo llevaría cuesta arriba. Sanchez ahora reparte su tiempo entre su actividad como exitoso entrenador de fútbol profesional y director de su aclamada marca de ropa deportiva, CVY.
Como entrenador, su fama ya lo precede. Sanchez ha preparado a algunos de los más célebres jugadores profesionales de fútbol actuales. Una de sus grandes estrellas es Jorge Ruvalcaba, quien juega en la Selección Mexicana de Fútbol.
Por otra parte, en 2020, después de una próspera trayectoria como estudiante de medicina en la Universidad de California Riverside, se decidió por un cambio profesional. En medio de la pandemia de COVID-19 hizo una maestría en negocios que preparó el terreno para la fundación de su empresa. Este emprendimiento nació de la inspiración que causaron en Sanchez aquellos atletas que perseveraban en su entrenamiento a pesar de las incertidumbres y desafíos que presentaba la nueva realidad.
Su visión se desarrolló de la idea núcleo de que tanto la fortaleza física como la mental y emocional son necesarias para destacarse en los deportes. Muchas veces los atletas profesionales deben restringir sus emociones, aguantar las lágrimas y los dolores para poder rendir al máximo en momentos cruciales. Para Sanchez, estas características son las que hacen a un jugador exitoso – un “crack” – en la vida y en la cancha.
Desde el comienzo de su empresa, se focalizó en llegar a jugadores de fútbol profesionales, tratando de que sus productos resonaran para cada uno a un nivel íntimo. Por ejemplo, una anécdota que describe bien este objetivo fue el encuentro con el jugador argentino de la Lazio, Valentín “Taty” Castellanos. Anotó cuatro goles contra el Real Madrid vistiendo las medias de su marca. Ahora le son indispensables.
La empresa nunca dejó de expandirse desde que inició. En 2022, se asoció al equipo Detroit City FC, y recientemente firmó un contrato con la Liga MLS para desarrollar sus camisetas. CVY también patrocina jugadores de fútbol, como Ronaldo Cisneros Morell, de las Chivas, el equipo de Guadalajara, México.
Una de las pasiones actuales de Sanchez es ofrecer seminarios de fútbol gratuitos para jóvenes en plazas y parques públicos en Riverside, California, donde él reside. Le gusta enseñarles, pero también sentarse a escucharlos y darse el tiempo de encontrar talentos para cultivar. Regularmente también apadrina y apoya financieramente los estudios y entrenamientos de promesas del fútbol.
Está convencido de que este deporte ha sabido encarnar en él los valores de la honestidad, el trabajo duro y la resiliencia, y los considera la piedra de toque de la educación que hoy imparte a su hijo y su hija.
Sanchez representa una inspiración y una leyenda para su comunidad, habiéndose forjado a sí mismo con inquebrantable dedicación y pasión por su oficio.