Latinos continúan rezagados en las carreras STEM
Expertos dicen que corresponde a la sociedad entera trabajar para que los estudiantes de color, las niñas y los menores de bajos ingresos tengan el acceso
Las carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) se encuentran entre los empleos mejor remunerados de los Estados Unidos con salarios por más de $100,000 al año, en comparación con el salario medio nacional de $46,000.
Sin embargo, aunque Estados Unidos es el líder mundial en investigación y desarrollo, se enfrenta a una escasez crítica de su fuerza laboral.
Aproximadamente el 43% de los trabajadores de STEM son extranjeros; y la brecha es critica para los estudiantes de color, las niñas y los menores de bajos ingresos.
Durante la videoconferencia: Lograr que las estudiantes abracen STEM, organizada por Ethnic Media Services, varios expertos hablaron sobre la importancia de involucrar a los niños en ocupaciones STEM, así como sobre algunas de las barreras en las aulas.
El doctor Louis Freedberg, director ejecutivo interino de EdSource, dijo que se espera que las carreras STEM crezcan a un ritmo dos veces superior al de otros empleos en la próxima década.
Por lo tanto, dijo que la pregunta clave es: ¿cómo nos aseguramos de que todos los estudiantes que actualmente asisten a nuestros sistemas de escuelas públicas tengan acceso a esas carreras?
“Históricamente, los trabajadores afroamericanos y latinos siguen estando muy subrepresentados en los empleos STEM”.
Indicó que la investigación documenta muy claramente, que los estudiantes de bajos ingresos, afroamericanos, latinos y nativos americanos están subrepresentados en términos de acceso a los cursos STEM como las ciencias de la computación, incluso en los cursos avanzados en matemáticas que son necesarios para ser admitidos a las universidades.
“Entre las muchas razones que explican esta situación destaca que los estudiantes de bajos ingresos no tienen acceso a servicios de apoyo y programas de verano que podrían centrarse en la ciencia”.
Así que dijo que cuando llegan a la secundaria, hay una inscripción desproporcionada en clases STEM o avanzadas.
“Una de las cuestiones clave es que los estudiantes vean cómo las matemáticas, las ciencias, la ingeniería y la tecnología son relevantes para sus carreras profesionales, y que no se trata de algo abstracto que pueden o no utilizar más adelante”.
Concluyó diciendo que más allá de ser un problema de acceso equitativo es también de derechos civiles.
“Se ha puesto mucho énfasis en la lectura y la alfabetización, lo cual es totalmente apropiado, pero a la par, debe haber un mayor enfoque en los logros en matemáticas y ciencias”.
El doctor Darin Brawley, superintendente del Distrito Escolar Unificado de Compton, dijo que trajo a Michelle Dawson del Distrito Escolar Unificado de San Francisco para desarrollar una visión que les permitiera eliminar la brecha entre los estudiantes de ascendencia latina y afroamericana para que encontraran oportunidades en las carreras STEM .
“Comenzamos en preescolar donde tenemos robótica en funcionamiento, robótica Lego, robótica VEX, diseño de videojuegos; y academias de matemáticas que se centran en la ingeniería”.
Agregó que su objetivo ha sido que cuando los niños se gradúen, puedan participar plenamente en la economía global, local o fuera del estado, ya sea que eso signifique ingresar a la fuerza laboral o continuar su camino en colegios y universidades.
“Hoy, el 52% de los estudiantes que se gradúan de Compton siguen carreras STEM en colegios y universidades”.
Daniel Voloch, director de programas de Girls Who Code, dijo que su misión es cerrar la brecha de género en los empleos tecnológicos de nivel inicial para 2030 y ayudar a crear una industria tecnológica que sea representativa de las diversas comunidades en las que vivimos.
”En Girls Who Code siempre decimos que no se puede ser lo que no se ve. En la escuela, a menudo estamos expuestos a líderes como Albert Einstein, Mark Zuckerberg o Neil Armstrong, pero no aprendemos lo suficiente sobre personas como Ada Lovelace, la primera programadora de computadoras del mundo, o Katherine Johnson, una matemática pionera cuyos cálculos ayudaron a la NASA a lanzar sus primeros orbitales”,
Dijo que las mujeres representan solo el 26% de la fuerza laboral tecnológica, y las afroamericanas y latinas el 5%.
“Girls Who Code está trabajando para cambiar eso al brindarle a la mayor cantidad posible de niñas acceso a codificación, educación, y apoyo gratuitos de alta calidad”.
Mencionó que en total, más de medio millón de niñas han pasado por sus programas para aprender a codificar mientras construyen una hermandad que enfatiza la valentía.
“Es importante señalar que más de la mitad de nuestras estudiantes provienen de grupos históricamente subrepresentados, y hemos visto evidencia sólida de que nuestros programas funcionan”.
La doctora Yasemin Copur-Gencturk, profesora adjunta de Formación Docente de la Universidad del Sur de California, dijo que a menudo suponemos que si alguien es bueno en matemáticas, debe ser muy inteligente.
“Los estereotipos llevan a suponer que ciertos grupos raciales y de género poseen una mayor capacidad matemática que otros. El problema es que moldean nuestra comprensión, percepciones, interacciones y decisiones”.
Dijo que desafortunadamente nadie está inmune a los prejuicios implícitos, incluyendo los profesores.
“En las estadísticas de estudiantes a quienes se les piden que resuelvan problemas de matemáticas, han observado que cuando los maestros veían un nombre que sonaba blanco, tendían a creer que el estudiante tenía una capacidad matemática mayor que los estudiantes con nombres que sonaban afroamericanos o hispanos.
“Este hallazgo sugiere que incluso cuando los maestros no reconocen ninguna diferencia en el desempeño de los estudiantes, aún perciben que los blancos tienen un mayor potencial matemático que los estudiantes de color”.
Observó que esto aplica también para el género, ya que los maestros tienden a considerar que los estudiantes hombres poseen mayor capacidad matemáticas que las estudiantes mujeres, y mucho más si se trata de las jóvenes de color.
“Otro hallazgo clave de nuestra investigación fue que las estudiantes mujeres y los estudiantes de color tienen más probabilidades de desanimarse por su potencial matemático cuando no responden correctamente un problema”.
Isis Cadena Núñez, quien comenzará a estudiar biología marina y ciencias del medio ambiente por la Universidad de California en Santa Cruz, dijo que fue durante su tiempo en la escuela intermedia y secundaria del Distrito Escolar Unificado de Compton, que se conectó con gente de color, como ella que quería ir a las carreras STEM.
“Eso es un contraste porque aquí en UC Santa Cruz no veo a mucha gente de color”, dijo.
Agradeció a los agentes de cambio de Compton Early College, una organización grupal que ayuda a empoderar a las mujeres, no solo en STEM, sino también en salud mental y bienestar y compromiso cívico.
“Fue un honor para mí decir que fui una de las líderes de STEM y que dirigimos muchas cosas que no solo involucraban a la escuela secundaria, sino también a nuestra escuela intermedia”.
Al mirar hacia atrás, dice que sigue sorprendiendo de lo que ha logrado.
“Muchos de los profesores en Compton presionan a los estudiantes, sin importar de dónde vengan ni cómo se vean. Y me encanta agradecer al señor Rosales, mi profesor de ciencias por tres años, fue quien me abrió las puertas a muchas cosas sobre todo a la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas es un campo dominado por hombres y blancos”.