Gripe aviar: activistas acusan a comercios de Nueva York de vender pollos “enfermos”
Activistas denuncian mercados en NYC por vender pollos enfermos antes del cierre por gripe aviar. Exigen clausura prolongada por riesgos sanitarios y maltrato

Los productos de pollo rellenos congelados siguen siendo una fuente de brotes de salmonella. Crédito: Dean Clarke | Shutterstock
En medio de la crisis por la gripe aviar, varios mercados de aves vivas en Brooklyn y Queens han sido acusados de vender pollos en condiciones deplorables antes del cierre temporal ordenado por el estado de Nueva York.
Activistas por los derechos de los animales denunciaron que algunos de estos establecimientos intentaron deshacerse rápidamente de su inventario, vendiendo aves con “aspecto enfermizo” y en situaciones que calificaron de insalubres y crueles.

NYCLASS, un grupo de defensa de los derechos de los animales, difundió imágenes de los mercados TIBA en Queens, Kikiriki Live Poultry y Pio Pio Poultry en Brooklyn, donde supuestamente se observaban pollos en jaulas abarrotadas, con pérdida significativa de plumas y en aparente estado de agonía.
Edita Birnkrant, directora ejecutiva de NYCLASS, advirtió que muchas de estas aves podrían haber estado infectadas con la gripe aviar, aunque no se han reportado casos positivos en estos comercios específicos. Sin embargo, Birnkrant criticó la falta de pruebas generalizadas y aseguró que la situación es un riesgo inminente para la salud pública.
El cierre temporal de los mercados de aves vivas en Nueva York, Long Island y el condado de Westchester fue decretado el viernes por la gobernadora Kathy Hochul tras la confirmación de siete casos de gripe aviar en la ciudad.
Según la orden ejecutiva, los establecimientos donde se detectaron aves infectadas debían ser “despoblados”, desinfectados y sometidos a inspecciones antes de reabrir. Los mercados sin casos confirmados tenían hasta el lunes para vender todo su inventario antes de cerrar por al menos cinco días. Sin embargo, los activistas consideran que estas medidas son insuficientes.
“Cerrar por unos pocos días no resolverá el problema”, advirtió Birnkrant, quien pidió a la gobernadora Hochul que mantenga los mercados clausurados hasta que la crisis esté bajo control. Según la activista, la reapertura rápida solo permitirá que más aves infectadas lleguen a la ciudad desde granjas industriales y terminen nuevamente en condiciones insalubres.
Durante el fin de semana previo al cierre, los mercados acusados se apresuraron a vender su stock. Mientras que TIBA y Pio Pio Poultry cerraron sus puertas el domingo para iniciar el proceso de desinfección, Kikiriki Live Poultry continuó operando hasta el último momento.
Empleados de este último mercado informaron que las ventas aumentaron considerablemente desde el anuncio de la orden ejecutiva y que esperaban vender todas las aves restantes antes del cierre programado para las 6 p.m. del domingo.
El control sobre las condiciones sanitarias de estos mercados ha sido cuestionado en el pasado. Kikiriki Live Poultry ya había sido advertido por el Departamento de Agricultura de EE.UU. en 2022 por una infracción no especificada.
Inspecciones previas en este establecimiento encontraron pollos con heridas abiertas, lo que refuerza las preocupaciones sobre la falta de supervisión. Además, los trabajadores de Kikiriki admitieron que no realizan pruebas a sus aves y que la responsabilidad recae en los granjeros y los inspectores estatales.
El temor a la propagación de la gripe aviar no es infundado. Hasta la fecha, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han confirmado 67 casos en humanos en EE.UU. La enfermedad, que afecta a más de 150 millones de aves de corral y 960 rebaños lecheros, puede provocar síntomas que van desde fiebre y tos hasta complicaciones respiratorias graves. Las autoridades sanitarias instaron a las personas expuestas a las aves infectadas a monitorear cualquier signo de enfermedad.
Sigue leyendo: