Eliminan cámaras en semáforos de South Gate y El Cajón
El programa que inició en el 2003 no tuvo éxito en lo económico, ni en la seguridad pública, ya que la mayoría del dinero recaudado por las infracciones fue a parar a la empresa dueña de los dispositivos y no hubo un cambio significativo en cuanto a reducción de accidentes
En una intersección de South Gate hay cuatro vigilantes a la espera de choferes que ignoren los semáforos. “Tic” se escucha cuando pasa un auto que no quiso esperar la siguiente luz verde. Y de las cuatro esquinas salen potentes luces que capturan la violación de tránsito.
Es el cruce de la avenida Atlantic y el bulevar Firestone, uno de los más congestionados de la ciudad.
“Aquí me han fotografiado dos veces, pero no estoy seguro si la última vez fue mi culpa, yo seguía viendo la luz verde”, cuenta Raúl Escobar, un vecino de Maywood que a menudo pasa por ahí.
Pero los días de estos guardianes que toman fotos a diestra y siniestra están contados. El municipio decidió recientemente apagarlas por las quejas de los residentes de que éstas no evitan accidentes, sino que los provocan, al forzar a los automovilistas despistados a frenar bruscamente.
“El ayuntamiento de South Gate tomó en cuenta la voz de la comunidad y el impacto que este programa tiene en sus residentes, mientras se tiene en mente la seguridad pública”, dijo el alcalde Gil Hurtado.
En vigor desde septiembre de 2003, el programa no tuvo éxito en las arcas, ni en la seguridad pública. Si bien el sistema generó 442 mil dólares en el último año fiscal, la mayor parte fue a parar a la empresa propietaria de los dispositivos, Redflex Traffic Systems; al tiempo que se registraron menos choques en intersecciones que no las tienen instaladas.
“Yo hasta dejé las llantas pintadas en el pavimento un día que no quise que me tomaran la foto”, cuenta Óscar Rodríguez, un joven que prefiere evitar esta esquina.
En la ciudad de El Cajón tuvieron motivos similares para retirar las cámaras de sus cruceros. Hace unos días los concejales de la localidad aprobaron quitarlas porque, en la práctica, no hubo menos accidentes, ni más ingresos, pues la medida les costaba unos 62 mil dólares cada año.
De hecho, la ciudad ordenó analizar lo que ocurría en una esquina sin los aparatos durante seis meses. El resultado fue que hubo 39 accidentes en ese período, sólo tres menos que cuando estaban. “El aumento en los choques es estadísticamente insignificante”, dijo Jim Redman, jefe de la Policía de El Cajón, al Concilio.
South Gate y El Cajón son las últimas de una lista de más de 50 ciudades de California que han decidido dejar de fotografiar a los choferes infractores y en la que se hallan Los Ángeles, El Monte, Maywood, Corona, Glendale, Anaheim, Whittier, Costa Mesa, Long Beach, Gardena, Pasadena, Newport Beach, Irvine y Paramount.
California fue el estado con más cámaras en intersecciones, pero su impopularidad creció con el costo de las infracciones. En las últimas dos décadas las multas subieron de 103 a 490 dólares, y las disputas en los tribunales se dispararon.
Ahora, en Montebello y el Este de Los Ángeles, lugares que aún confían en los aparatos, la iniciativa AB 666 podría cargar la multa al dueño del auto, sin importar si este va o no en él.