Clave para Gigantes: un estadio que pesa
La afición de San Francisco llega a ser un factor de triunfo
SAn FRAncsicoy
La casa manda. No siempre pero así debería ser en la mayoría de los deportes de alta competencia donde un estadio repleto de aficionados y vestido con los colores del equipo despliega tal motivación que llega a ser un factor.
Los Gigantes de San Francisco aprovechan al máximo su ventaja de local y lo han sentido los Cardenales.
Después de su dramática victoria en entradas extras el martes ante 42,716 espectadores el vibrante triunfo por 6-4 del miércoles los dirigidos por Bruce Bochy saben cuanto le deben a su público AT&T Park en esta serie. Definitivamente, el estadio de los Gigantes presenta un ambiente bien difícil para el oponente.
Los Gigantes han vendido cada boleto para sus partidos de local en 327 fechas consecutivas de campaña regular. En el 2014, asistieron más de tres millones de fanáticos al estadio por quinto año seguido. Hay mucho ruido siempre, por supuesto, con una marea de negro-anaranjado y creativos disfraces como los Kung Fu Panda que le rinden honor a Pablo Sandoval.
“Sabemos lo afortunados que somos con la tremenda base de fanáticos que tenemos”, dijo Bochy, ganadrode dos títulso desde 2010. “Tuvimos nuestros altibajos, nuestros bajones, pero el estadio estuvo a toda capacidad para cada juego aquí.
Aun cuando las cosas se nos pusieron difíciles, (los fanáticos) nos respaldaron. Eso es algo poco común, y muchos jugadores, coaches y mánagers me han dicho que no pueden creer lo que tenemos aquí”.
Del otro lado, los Cardenales tuvieron muchos problemas jugando de visita y con 39-42 fuera del Busch Stadium, fueron los peores entre los clasificados a postemporada de este año.
“A uno le encanta jugar de cualquier forma, pero (es bueno) contar con esta clase de apoyo de los fans. Los jugadores no sólo quieren ganar por sí mismos, sino que sienten que los fanáticos son parte de este club”
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