Advierten riesgos de contaminación
Uno de cada dos hispanos vive en áreas que violan normas de contaminación
WASHINGTON, D.C.- Un nuevo reporte difundido ayer, indicó que uno de cada dos hispanos en Estados Unidos, viven en condados que violan con frecuencia las normas de contaminación de aire. En el caso de áreas como California, el trabajo advirtió sobre la alta exposición de los latinos al mercurio, lo que puede ocasionar graves problemas de salud.
El trabajo titulado “Los Latinos y la Contaminación del Aire: un llamado a la acción” fue realizado por el Consejo para la Defensa de Recursos Naturales (NRDC), la Coalición Nacional de Latinos Sobre el Cambio Climático, el Centro para el Progreso Americano y la Federación Nacional de Vida Silvestre (NWF) y lanzado en conjunto con la Asociación Nacional de Médicos Hispanos (NHMA).
El trabajo se realizó dos semanas después que la Administración decidiera pedirle a la Agencia de Protección Ambiental (EPA) que frenara su trabajo para adoptar un estándar de ozono más fuerte y poco antes de una serie de votaciones en la Cámara de Representantes para bloquear provisiones adicionales en centrales eléctricas, hornos de cemento y otras plantas industriales.
Según Adriana Quintero, vocera de NRDC, el objetivo del reporte es informar a la población y también que la Casa Blanca “entienda que los intereses de los hispanos están en esta área. Los millones de latinos que van a votar en las próximas elecciones la considerarán”, dijo.
El informe destacó que en 2008, 4.7 millones de hispanos habían sido diagnosticados con asma. Una enfermedad agravada por áreas de alta contaminación del aire.
En cuanto a la contaminación por mercurio, el estudio explicó que para poblaciones como la ubicada en la zona norte de California, la cercanía a plantas de electricidad implica una peligrosa exposición al mercurio.
Esto se debe a que cuando se quema carbón para generar electricidad, el mercurio escapa a la atmósfera y luego regresa al suelo, ríos y mar, a través de la lluvia, lo que contamina pescados y mariscos de la zona.
Entre 2005 y 2007, investigadores de la Universidad de California, Davis, indicaron que en promedio, los 45 participantes hispanos en su estudio medioambiental, ingerían 13.9 microgramos de mercurio diarios. De acuerdo al Departamento de Salud, personas que consumen más de 100 gramos de pescado al día, se consideran en riesgo a altas dosis de este metal.
“Los efectos del mercurio dependen de la dosis y el tiempo de exposición. Sin embargo, en general las personas expuestas a este metal presentan daño cerebral y a sus riñones, que es donde más fácil se concentra este tóxico. Esto les puede ocasionar síntomas como irritabilidad, nerviosismo, temblores, alteraciones de la visión, sordera, falta de coordinación y dificultades de memoria”, explicó el doctor Héctor Álvarez, Médico y PhD en Ciencias médicas.
Actualmente existe una norma de mercurio pendiente en EPA, que el estudio define como crítica para la salud pública. “Protegería a los casi 40% de latinos que viven a menos de 30 millas de una planta de energía”, indicó el trabajo.
“Los efectos en los niños son similares a los adultos, pero la ingesta es más peligrosa en los infantes, ya que es más fácil que pase directamente a su cerebro e interfiera con su desarrollo normal. El mercurio también puede pasar de la madre al feto a través de la placenta, o al recién nacido a través de la leche, causando diversas alteraciones, que pueden ser sutiles, tales como deficiencias en el coeficiente intelectual o extremadamente severas, como el retraso mental”, agregó.
El nuevo reporte especificó que la contaminación por mercurio puede ser reducida de manera considerable con instrumentos para controlar su difusión al aire.