El PRI apela a la unidad
El partido busca el candidato a la Presidencia que los representaría en las próximas elecciones de 2012, en México
MÉXICO, D. F. (EFE).- El Partido Revolucionario Institucional (PRI), el mayor de la oposición en México, apeló ayer a la unidad al celebrar un cónclave de consejeros en el que decidió buscar una elección abierta entre militantes y simpatizantes el 8 de febrero para decidir quién será su candidato a la Presidencia en 2012.
“Nos exigen los tiempos que vivimos de una sólida unidad, de fortalecer al partido, de vencer las adversidades con valor y firmeza”, dijo el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Humberto Moreira.
Al comienzo de los trabajos del Consejo Político Nacional del PRI Moreira, también el exgobernador de Coahuila, recordó que la formación política, que gobernó México de 1929 a 2000 pero que ha perdido las dos últimas presidenciales, viene de “ganar las elecciones en Hidalgo, en Nayarit, en Coahuila y en el Estado de México”.
“Nos encontramos ahora a ocho meses y veintidós días de la elección (…) de ganar las elecciones, y de con ello iniciar una nueva etapa, una mejor etapa para el país”, dijo Moreira.
La mayoría de las encuestas publicadas en México apuntan a una victoria del PRI en los comicios que se celebrarán el 1 de julio de 2012, de los que saldrá el sucesor del presidente Felipe Calderón, del conservador Partido Acción Nacional (PAN).
“Nuestros adversarios, ante la falta de resultados optan por la descalificación, por los ataques, por la guerra sucia, por la guerra negra. En esta elección no les funcionará”, les advirtió a los consejeros.
Dos priistas se perfilan como los grandes aspirantes por la candidatura a la presidencia, el senador Manlio Fabio Beltrones, y el exgobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, quien lleva ventaja a su contrincante.
Ambos estuvieron en el evento de ayer y se abrazaron en medio de gritos de “¡Unidad, unidad!”, informó el diario El Universal.
Moreira lamentó que “más de veinte millones de mexicanos” estén actualmente en pobreza extrema en “un país lleno de miedo por la violencia de esta guerra que nos ha dejado casi 50 mil muertos”.
Dijo que en los próximos meses el PRI enfrentará “los intentos de nuestros adversarios por dividirnos” y “ataques desmedidos para tratar de lograr lo inevitable, que es el regreso del PRI al gobierno”.
“Ante ello se requiere de unidad, de unidad real, que nos lleve a tener claro que no solo es ganar las elecciones, sino recuperar el país”, añadió.
El acto, celebrado en la sede del PRI en Ciudad de México en presencia de 1,100 consejeros del partido, designó a Enrique Jackson como nuevo secretario técnico del Consejo Político Nacional del partido en sustitución de Manuel Aguilera.
Con ello Jackson se convertió en el árbitro de una elección de la que saldrá el próximo aspirante del PRI a la Presidencia.
Al acto también asistieron los gobernadores del PRI, un partido que en las pasadas presidenciales de 2006, con Roberto Madrazo como candidato, quedó en un modesto tercer puesto, muy alejado del hoy presidente Felipe Calderón y del aspirante izquierdista Andrés Manuel López Obrador, que perdió por una exigua diferencia de 0,56 puntos porcentuales.
Lo ajustado del resultado derivó en un complicado conflicto postelectoral en el que López Obrador denunció ser víctima de un fraude en su contra pero el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) desestimó sus argumentos y dio la victoria a Calderón.
El alto tribunal determinó que en la carrera por la Presidencia hubo “irregularidades” pero consideró que las mismas no eran suficientes para invalidar las elecciones, las más ajustadas de la historia reciente de la democracia mexicana.